Un nuevo movimiento social, que promete dar un giro de 180º a las relaciones entre los habitantes de las parroquias viguesas, se ha iniciado en la ciudad olívica. La iniciativa Do Barrio, gestionada por la fundación Balms y el Centro Integral de Desarrollo Local (CIDEL) de Galicia, tiene como objetivo despertar el sentimiento de pertenencia de los vecinos de los barrios de Vigo, mostrando la realidad de estos lugares y logrando impulsar la colaboración y la gestión ciudadana de los mismos.

A través de una serie de entrevistas, vídeos y fotografías, Do Barrio transmite la esencia de cada una de las parroquias viguesas que, por ahora, forman parte de la iniciativa: O Casco Vello, Valladares, Saiáns y el Calvario. La intención es ir abarcando poco a poco todos los barrios de la ciudad. Desde la organización adelantan que las próximas incorporaciones serán Beade y Teis.

Do Barrio nació a raíz de un proyecto de cooperación entre Galicia y República Dominicana. Las fundaciones que hoy en día gestionan Do Barrio llevaron a cabo una serie de actividades de sensibilización en torno a la colaboración ciudadana y la participación vecinal para poder compartirlo con el barrio dominicano de Santa Lucía, donde estaban comenzando a trabajar en este tipo de movimientos. Finalmente, se dieron cuenta de que era una cuestión muy interesante a nivel local, así que decidieron seguir adelante, de forma independiente, en la ciudad de Vigo.

Una ciudad diversa, llena de realidades diferentes

La ciudad de Vigo destaca por diversa; barrios mayoritariamente urbanitas como la Zona Centro contrastan con el carácter más rural de Cabral o Valladares. Esta variedad de realidades aumenta el interés por crear redes vecinales, puesto que las necesidades de ciertas zonas de la ciudad no se corresponden con las de otras.

Imagen extraída de la web de Do Barrio.

"A veces puede parecer que esa participación vecinal es ajena a ti, pero es todo lo contrario", aseguran desde Do Barrio. La necesidad de construir ciudades humanas y con un desarrollo sostenible pasa por todos sus habitantes, que son los que viven el día a día de los barrios y a los que les afectan sus peculiaridades.

"En un contexto Covid, que nos obliga a estar más encerrados en nuestra casa, si no creamos esas redes y esos vínculos, nos quedaremos aislados", asegura Sara Moscoso, miembro de la Fundación Balms.

Buscando acercarse a los vecinos más jóvenes

Do Barrio pone el foco en la necesidad de crear una serie de vínculos sociales en la mínima expresión de las ciudades: los barrios. Sensibilizar en torno a la importancia de colaborar en la gestión y el desarrollo de estas comunidades es fundamental para suplir las necesidades que puedan surgir en estos entornos.

"Nos dimos cuenta de que hay una ruptura generacional. Las personas más involucradas en el movimiento vecinal son mayoritariamente personas muy mayores, no hay un relevo", señala Sara Moscoso. Ante esta premisa, con Do Barrio quieren generar un sentimiento de pertenencia entre los ciudadanos más jóvenes. "Optamos por hacerlo de manera más visual y moverlo en redes para generar esa curiosidad entre la gente joven", aseguran desde el movimiento.

Por ahora, la línea de acción de esta iniciativa estará centrada en documentar y transmitir a los vigueses el universo de los barrios, sin embargo, poco a poco se irán realizando otro tipo de actividades. "De cara al futuro hemos pensado realizar cursos o talleres de capacitación y formación, para que los más jóvenes se vinculen a los movimientos sociales", cuentan desde Do Barrio. Algunas de las enseñanzas que el movimiento quiere transmitir a la ciudadanía pasan por "recuperar el papel reivindicativo de las asociaciones vecinales".

Desde Do Barrio se muestran muy impresionados con la buena acogida que ha tenido el proyecto, "es una iniciativa intergeneracional que engloba a todas las personas. Todo el mundo se quiere ver representado y se sienten orgullosos de los lugares a los que pertenecen". Lo cierto es que cada vez son más los barrios que quieren formar parte de esta bonita iniciativa que, poco a poco, será el reflejo de un Vigo diverso basado en la colaboración vecinal.