Carmen Liste Vázquez, que emigró a Tarbes (Francia) en 1964 y María José Pérez, que estuvo en Bauru y Santos (Brasil) desde 1956 a 1968, han sido este martes las voluntarias del programa Fálame da emigración que Afundación ha celebrado en Pontevedra. Las dos mujeres han contado su historia en un encuentro intergeneracional en el IES Frei Martín Sarmiento, dando por inaugurado el retorno de este programa tras la pandemia, que se repetirá en las siete principales ciudades gallegas y las poblaciones de Viveiro, Betanzos, Pontedeume y Monforte de Lemos.

Pilar Rodríguez, orientadora del IES Frei Martín Sarmiento, destacó "la importancia que tiene para los estudiantes convivir con otras experiencias como las de las personas mayores participantes, para comprender la diversidad que tenemos hoy en día y contarla en el aula y trabajar los contenidos que tenemos en los programas educativos".

Fálame da emigración y Falamos da escola se articulan a través de dos encuentros intergeneracionales en el aula, guiados conjuntamente por los docentes y personal de los Espazos +60 de Afundación, a los que precede una fase de preparación por parte del alumnado y de las personas mayores voluntarias. Entre ambos encuentros, el alumnado es invitado a investigar, según el programa en el que participen, sobre la experiencia de su familia en la escuela o en la emigración para compartirla en el siguiente encuentro y, de este modo, establecer un vínculo más profundo con las personas mayores.

Con el objetivo de que el programa amplíe su alcance y tenga un carácter colaborativo, Afundación traslada a su página web todo el material didáctico del proyecto, el material documental que surge de cada encuentro (fotografías, vídeos, testimonios…) y el que aportarán los alumnos y alumnas de los centros escolares participantes sobre las historias en la emigración y en la escuela de sus familiares. 

Ambos proyectos proporcionan un marco de aprendizaje no formal que favorece la curiosidad, la empatía y la motivación del alumnado, al tiempo que contribuye a derribar estereotipos por ambas partes, en línea con el modelo de educación transformadora promovido por Afundación. A partir de un relato inicial de las personas voluntarias participantes, alumnado y mayores establecen un diálogo y una reflexión conjunta acerca de la escuela de ayer y de la ahora o sobre la emigración vivida por los mayores y la de hoy en día, un intercambio especialmente enriquecedor si hay alumnado inmigrante en el aula.