La educación es base y cimientos de los hombres y las mujeres del futuro, así como de la igualdad real y efectiva entre ellos. Que esa raíz no se tambalee depende, en el mismo grado, del papel que jueguen los progenitores en las casas, y en esto coinciden en buen grado los profesionales de la docencia.
Desde hace unos años, el 8M va mucho más allá de un día. De hecho, más allá de una semana y de un mes. Y es que en los centros escolares gallegos, las conversaciones sobre igualdad, las semanas dedicadas a las mujeres en la ciencia o en el periodismo, o los núcleos de debate para abordar este y otros asuntos vitales para el devenir de los alumnos y su integración como seres sociales, son parte de la materia anual.
Los docentes consultados para este artículo coinciden en que trabajar la igualdad da sus frutos: "Hoy en día creo que esta generación no se plantea no hacer una carrera por ser mujer u hombre", opina Teresa Portela, docente de Primaria en el Colexio María Inmaculada (Carmelitas) de Vigo. "También ven injusto que una mujer gane menos que un hombre y lo argumentan", anota.
Sin embargo, en el mundo de la docencia quedan incógnitas por responder: ¿Qué ocurre cuando, al llegar a Secundaria, se observan conductas controladoras de un adolescente para con su novia? También preocupa, y mucho, el papel en todo esto de las redes sociales. Portela lo tiene claro: "Los vuelven mucho más inseguros y esa inseguridad puede repercutir a muchos niveles", dice la tutora de Carmelitas, que también advierte sobre la falta de reflexión existente en todos los rangos de edad y que se ve afectada por la cultura de la inmediatez.
Con respecto a lo anterior, en este centro concertado, al igual que en O Castro British International School, la prohibición del uso de los terminales móviles se remonta varios años atrás. La decisión se adoptó, en ambos casos, para proteger la intimidad de los alumnos en las aulas.
La importancia del pensamiento crítico
Por otro lado, en la necesidad de formentar la reflexión entre los más jóvenes coinciden en O Castro, en donde, a través de la asignatura PSHE (Personal Social Healh and Economic) invitan a sus alumnos al debate. "Se generan debates entre los alumnos, se analizan las noticias, se fomentan los valores… Es una asignatura que, en mi opinión, es cada vez más importante", explica Chris Long, director de O Castro British School.
Precisamente, en PSHE también se analiza, con el alumnado, la influencia que llegan a ejercer las redes sociales o personajes del mundillo –youtubers o influencers– en ellos mismos. En este y otros aspectos, en O Castro consideran vital que los alumnos adquieran la destreza de "pensar por sí mismos y reflexionar".
Semanas temáticas
Celebrar jornadas y semanas temáticas dedicadas a revalorizar las figuras femeninas y para la concienciación en favor de la igualdad, supone otro de los puntales de la educación en este sentido. En O Castro conmemoran estos días la "International Woman Day" -se celebran charlas con mujeres procedentes de diferentes carreras-.
En uno de los centros públicos de la provincia, el CEIP Plurilingüe Feliciano Barrera (Ponteareas), la igualdad se trabaja "todos os días do ano", pero también en estas fechas de manera especial: "Este ano, o proxecto do centro é a radio, polo que esta semana estamos traballando a biografía de distintas mulleres neste medio", explica Alba Amoedo, directora del colegio ponteareano. "Ao longo do curso facemos distintas iniciativas: Rimas pola igualdade ou entrevistas ás mulleres das nosas vidas, por exemplo, ás nosas nais, tías, avoas. Tamén cambiamos os finais dos contos que teñen os roles de xénero moi marcados e buscamos como serían doutro xeito e temos charlas de mulleres importantes. Por exemplo, o ano pasado tivemos a Mari Ángeles Pena, especialista en química cuántica", añade.
Al igual que la también profesora, Teresa Portela, Alba Amoedo considera que todo este trabajo tiene sus resultados: "Por exemplo, nun conto, pois din cousas como… ‘Joba! pois a princesa podería terse salvado soa sen necesidade de que viñera o príncipe’ e tamén comprenden que unha nena pode, por exemplo, traballar na mecánica cando sexa maior", relata. "Son cousiñas pequenas e sutiles, pero vemos que se mellora e se evoluciona", anota.
En términos globales, los docentes coinciden en que, a pesar de tratarse de edades tempranas, sí se observa algún pequeño detalle que podría anticipar una situación discriminatoria: "Non observamos unha conducta discriminatoria, por exemplo, á hora de que os nenos non deixen xogar ás nenas ao fútbol, pero, ao mellor, si pequenas cousiñas: Unha frase, ou, cando teñen que poñer un exemplo, pois vanse máis aos roles de xénero", explica la profesora. "Por iso decidimos traballar con eles e, sobre todo, falar moito con eles. É fundamental", concluye la directora.