La Plaza da Pedreira, en Pontevedra, era hoy un hervidero de gente. El Concello programó este jueves por la tarde un acto especial en el Pazo de Mugartegui para recibir a la jugadora de la Selección Española de Fútbol Tere Abelleira, recién llegada desde Australia tras conseguir el primer Mundial Femenino para el conjunto patrio. Con todo, aunque ese evento arrancaba en torno a las 20:30 horas a puerta cerrada, los pontevedreses no quisieron perderse el recibimiento a la campeona, originaria de la Boa Vila.

Aplausos, vítores, camisetas de España. Así recibieron un centenar de personas a Tere Abelleira, que acudió con la medalla de oro del Mundial colgada al cuello. La joven futbolista, actual centrocampista del Real Madrid femenino, no podía dejar de sonreír mientras avanzaba por el pasillo formado en la plaza para ella. Antes de entrar al pazo de Mugartegui no pudo contener las lágrimas cuando escuchó cómo toda la plaza coreaba ‘Campeona’ con toda la pasión.

Destacaba entre la multitud la presencia de múltiples niños, que esperaban con los ojos brillantes para que Abelleira les firmase un autógrafo en las hojas de papel que portaban en alto, impacientes. La jugadora les indicó con un gesto que volvería hasta ellos para dejar plasmada una dedicatoria. Además de los propios vecinos de Pontevedra, una banda de gaiteiros ponía música al encuentro y un amplio despliegue policial vigilaba la zona.