Continúa una semana intensa en la dirección deportiva del RC Celta. Tras el cese de Óscar García y a la espera de la llegada de Eduardo Coudet como nuevo técnico, el club ya busca los primeros fichajes para el argentino.
El nombre que ha sonado con más fuerza en las últimas horas es el de Mario Mandzukic, que actualmente se encuentra libre por lo que podría llegar sin tener que negociar con otro club. El delantero croata apenas disputó cinco partidos en Qatar al comienzo de esta temporada y podría regresar a La Liga. En la temporada 2015/16 jugó en el Atlético de Madrid y llegó a la final de la Champions League antes recalar en la Juventus durante cuatro temporadas.
El subcampeón del mundo es un caramelo muy apetecible pese a tener 34 años. Prueba de ello es que detrás de su fichaje también se encuentran el Aston Villa y West Ham, cuyo músculo financiero es claramente superior al de cualquier club español.
Los caminos para disponer de liquidez
En el cierre del mercado el Celta solamente disponía de un millón de euros brutos para poder realizar algún fichaje e incorporarlo en su masa salarial. Lo cierto es que el tope salarial es una materia tan compleja y que ha variado tanto que la propia LFP ha convocado una charla para este viernes para explicar la normativa a fondo.
Sin embargo, el club cuenta con varias jugadas para poder aumentar su límite salarial y poder fichar sin problema ahora o en invierno.
- Ampliación de capital: La más compleja de todas, permitiría conseguir hasta un 25% del capital ampliado. No parece que Carlos Mouriño esté dispuesto a ejecutar una opción reservada para situaciones límite como la vivida este verano por el Deportivo.
- Comprometer una venta antes del final del verano. El Celta tendría que vender a alguno de sus jugadores con mejor cartel antes del término de la temporada. Parece complicado en una plantilla ya limitada.
- Variar los plazos de pago de los fichajes. Como pudimos comprobar en la venta del Lobotka el invierno pasado, los clubes tienen la posibilidad de alterar los pagos pendientes, ganando liquidez.
- Ampliar la duración de los contratos. Si un jugador es renovado con el mismo salario, aumenta el período de amortización de la ficha.
La falta de fichajes fue una de las principales quejas de Óscar García durante las últimas semanas. Si bien es cierto que el croata no fue una de las opciones ofertadas al técnico catalán, sí que se hizo con otros jugadores de renombre sin equipo, sin llegar a agradar ninguno al ex-entrenador.