El Celta se deja sus aspiraciones europeas ante una Real Sociedad que hizo valer su eficacia. En un emocionante partido que nada tendría que envidiar a una Superliga en la que ambos clubes se posicionaron en contra antes, durante y después del encuentro; los vigentes campeones de Copa del Rey. Pese a abrir el marcador Hugo Mallo, una contra rápida de Portu y Carlos Fernández y dos penaltis innecesarios lastraron a los vigueses, condenados después por la falta de criterio de Gil Manzano.
Eduardo Coudet lograba recuperar a Santi Mina diez días después de su lesión ante el Sevilla, esperando aportar más al juego ofensivo que Ferreyra ante el Cádiz. De nuevo, Murillo y Araujo formaban de nuevo la pareja de centrales con Iván Villar bajo palos. El resto, los habituales.
El Celta comenzaba el encuentro con la posesión mientras los donostiarras esperaban las mejores ocasiones, una relación que se intercambió con el paso de los minutos. Un encuentro con ritmo, ocasiones y buenas jugadas en ambas áreas donde el nivel de los centrales definiría el resultado final.
La primera acción polémica llegaría en el minuto 15; cuando una fuerte entrada de Elustondo sobre Mina haría entrar al VAR. Pese a no señalar inicialmente nada, Gil Manzano mostraba finalmente una amarilla al central vasco que comenzaría el "show" del colegiado.
Golpeaba primero el Celta con un extraordinario cabezazo de Hugo Mallo tras un córner botado por Denis Suárez. El diestro marinense se desquitaba de las dos ocasiones que tuvo ante el Cádiz el domingo y volaba por encima de toda la defensa local.
Sin embargo, a los pocos minutos la Real aprovechaba una rápida jugada entre Carlos Fernández y Portu para que el delantero -ambos pretendidos en su día por el Celta- mostrara las costuras de Murillo e igualara el encuentro. Vuelta a empezar.
Primer penalti detenido en Liga por un portero del Celta desde enero de 2016
Una salida en falso de Iván Villar propició la primera pena máxima del partido. Sin embargo, el meta de Aldán pudo resacirse y adivinó el lanzamiento de Isak. Su grandísima estirada supone el primer penalti detenido por un portero del Celta desde 2016 y el tercero en Liga desde 2014. Aunque Carlos Fernández remató a las mallas el rechace, este fue invalidado por adelantarse.
Sin embargo, minutos después sí que marcaría la Real desde los once metros para el definitivo dos a uno. Januzaj no fallaba tras un ingenuo penalti de Murillo a Le Normand y tiraba por la borda la ventaja celeste en menos de veinte minutos
Ambos equipos mantuvieron un alto ritmo en la segunda parte pero sin tanta intensidad
El partido seguiría un ritmo similar en la segunda parte, aunque con menor acierto y resolución. Ni la entrada de Solari ni de Fran Beltrán logró mejorar al Celta en ataque, aunque sí lo hizo José Fontán en defensa.
Por su parte, los txuri-urdines fueron ralentizando el juego hasta el punto de desquiciar a Aspas y el banquillo vigués; mientras Gil Manzano mostraba varias amarillas y hacía oídos sordos a las protestas por posibles penaltis.
En la recta final, Coudet arriesgó dando entrada a Facundo Ferreyra por Néstor Araujo. Sin embargo, Imanl Alguacil lograría que sus jugadores mantuvieran el tipo en defensa; frenando las embestidas celestes.
Tras el encuentro Hugo Mallo valoraba el partido asegurando que podían haber sacado al menos un punto por dos goles "evitables". El capitán mostró su decepción con las decisiones arbitrales, con un "me gustaría decir realmente lo que pienso pero me voy a callar". Todos los equipos tenemos muchas dudas sobre su uso, el VAR tiene que ayudar y no confundir. También apoyó el mensaje de ambos equipos en contra de la Superliga, asegurando que "Todo se gana en el campo y con la afición, el fútbol es de ellos y a ellos nos debemos".