La iniciativa Lingoreta y Lingoreto. Respiración nace de una reflexión de Diana Lameiro Aznar, fundadora del centro de logopedia Lingoreta, que, siendo consciente del notable porcentaje de casos de respiración bucal en niños, decidió buscar una solución sencilla y educativa para atender este problema desde la etapa infantil.
Valiéndose de una "cuentacuentos sanitaria", una canción y dos pequeños muñecos, el centro Lingoreta recorre las escuelas infantiles gallegas para que los más pequeños aprendan la importancia de la respiración nasal. A través de una actividad lúdica y didáctica, Lingoreta y Lingoreto consiguen concienciar al mismo tiempo que divierten y entretienen.
Con su visita a los centros Diana Lameiro y la pedagoga Sandra Fernández Prado no solo buscan educar a los niños, sino también a los adultos. Se les pide a las familias que observen la respiración de sus hijos en el contexto del hogar, para poder recoger información y analizarla. Una vez hecho un análisis estadístico con las respuestas obtenidas se realiza un informe de conclusiones -que hasta ahora ha mostrado una prevalencia de la respiración nasal en los participantes- y se transmiten una serie de recomendaciones. En un futuro la intención pasa por realizar una campaña más amplia de concienciación que pueda abarcar también a los profesionales del sector sanitario.
La importancia de una correcta respiración nasal
Los casos de respiración bucal en niños pueden derivar simplemente de un mal hábito que nunca ha sido corregido, especialmente a edades tempranas. Sin embargo, en ocasiones puede deberse a un problema médico. Los motivos más habituales para este tipo de respiración incorrecta pueden ser la existencia de una obstrucción en las vías aéreas debido a vegetaciones, un tabique nasal desviado, alergias u otras cuestiones.
Lingoreta y Lingoreto. Respiración busca concienciar a la comunidad educativa, a las familias y al personal del ámbito sanitario de la importancia que tiene una correcta respiración nasal. Desde Lingoreta quieren conseguir reducir los casos de respiración bucal detectados desde el centro en edades ya avanzadas, que pueden acarrear graves repercusiones en la calidad de vida de los menores. El desarrollo incorrecto de la mandíbula, una oxigenación cerebral deficitaria, un descanso no reparador o repercusiones a nivel de aprendizaje en el entorno escolar, son solo algunas de las consecuencias directas que tiene la respiración bucal no corregida.
Hasta ahora, Diana Lameiro y Sandra Fernández Prado han estado en la escuela infantil de la Universidad de Santiago de Compostela, en las dos escuelas infantiles municipales de Sanxenxo y en la escuela As Camelias de Vigo. La próxima semana visitarán la escuela infantil O Xardín, en Vigo.
Desde el centro Lingoreta quieren trasladar algunas recomendaciones a las familias, para intentar evitar un problema mayor en edades avanzadas. Lo más importante es que observen la respiración de sus hijos y si sospechan de una posible respiración bucal –porque los ven cansados, tienen la boca abierta en muchas ocasiones, roncan u otras señales– acudan a su pediatra lo antes posible, para que coordine una visita a otorrinolaringología, logopedia o a ambas.