El partido entre el Celta y el Villarreal de hace dos jornadas tuvo un protagonista especial: Albertiño. Las cámaras de El Día Después captaron cómo este joven aficionado vivía los 90 minutos y cómo declaraba su amor no solo por el color celeste, sino también por Iago Aspas.
Albertiño regresó a Balaídos para ver la victoria del Celta ante el Athletic, y también para cerrar su historia. "Vamos, Iago, que hoy marcas un gol y nos la dedicas a la grada de xiareiros", decía antes de entrar en el partido. Pero el club le tenía guardada una gran sorpresa al final del encuentro: conocer a su gran ídolo que, además, le regaló su camiseta, "la del partido".
Aspas marcó el tanto de la victoria, pero el mejor regalo se lo llevó Albertiño, del que su hermano presumió en el colegio y al que reconocieron con su padre en una visita reciente a Madrid. Fundido en un abrazo con la estrella del Celta, el sueño del joven aficionado terminó con él tirado sobre el césped, como el que no cree lo que le acaba de pasar.
La camiseta, dice todavía emocionado, la va a guardar. Igual que el recuerdo de un encuentro breve, pero que jamás olvidará.