"Payaso, te voy a espabilar yo" fue la más suave de las amenazas que pudo escuchar un joven árbitro, de solo 14 años, que pitó durante un partido el pasado fin de semana en O Porriño (Pontevedra). Ocurrió durante un encuentro entre benjamines del Pontellas y el Candeán, en el que al acabar comenzó una acalorada disputa en la afición.
Según cuenta el acta del partido, recogida por un usuario de Twitter, el árbitro se libró de la agresión de un padre del equipo local porque uno de los aficionados del Candeán se interpuso entre él y el joven, al que se dirigía en actitud muy agresiva. En el mismo documento, el árbitro cuenta cómo la situación escaló hasta que se hizo insostenible y su padre se vio obligado a llamar a la Guardia Civil, mientras él estaba "muy nervioso" y encerrado solo dentro del vestuario.
Además, según ha denunciado la delegación viguesa del Comité Técnico Gallego de Árbitros (CTGA), el joven tuvo que soportar numerosos insultos desde la grada durante el partido. El árbitro solicitó al club local que tomara medidas y que llamase a las fuerzas del orden, a lo que el Pontellas, según señala el Comité Técnico, se negó, y uno de sus directivos llegó incluso a justificar el intento de agresión.
La Guardia Civil identificó y propuso para sanción al presunto agresor, que conocía la edad del joven puesto que, especifica el mismo árbitro, "portaba la escarapela de -18".