La flota gallega contará el año que viene con cerca de 7 millones de euros para mejorar la higiene, salud, seguridad y condiciones de trabajo a bordo de los buques pesqueros, así como su eficiencia energética y aumentar el valor añadido y la calidad de los productos del mar.

Se trata de los mayores recursos puestos a su disposición en la historia para el desarrollo de iniciativas de modernización; una cantidad que triplica la que se movilizó a lo largo del presente ejercicio, cuando se contó con 2,4 millones de euros. Las ayudas se dirigen a propietarios de embarcaciones pesqueras que realicen inversiones que fomenten una pesca sostenible.

El objetivo de esta inversión es contribuir a facilitar la labor y las condiciones de vida de las tripulaciones de los barcos beneficiados así como optimizar la utilización que hacen de la energía con medidas para mitigar el cambio climático, como el cambio de motores antiguos y más contaminantes por otros más eficientes. A esto se sumará la llegada del nuevo Fondo Europeo, Marítimo, de Pesca y Acuicultura (Fempa), que provocará un aumento de la capacidad de las embarcaciones gracias a las mejoras de habitabilidad y seguridad.

Más de setenta buques beneficiados

Este año, fueron más de setenta buques de las distintas modalidades de pesca, desde artes menores a barcos de gran altura, los que se beneficiaron de las subvenciones con un total de 85 actuaciones. Casi medio centenar de las ayudas fueron dirigidas a acciones para mejorar la higiene, salud, seguridad y condiciones de trabajo a bordo, rondando los 800.000 euros.

Otras 14 iniciativas rondaron los 200.000 euros para limitar el impacto de la pesca en el medio marino; y 12 proyectos recibieron alrededor de medio millón de euros para aumentar el valor añadido, la calidad de los productos y la utilización de capturas no deseadas.

De cara al siguiente ejercicio se pretenden reforzar los proyectos centrados en la mejora de la eficiencia energética y en mitigar el cambio climático, que en 2023 fueron un total de cuatro proyectos que se ejecutaron por más de 50.000 euros, a los que hay que añadir otras seis iniciativas consistentes en el cambio de motores.

Más de 380 proyectos aprobados desde 2016

De cara al próximo ejercicio, será el Fondo Europeo, Marítimo, de Pesca y Acuicultura (Fempa) el que financiará estas actuaciones; hasta este año, fue el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP) el que permitió aprobar más de 380 proyectos desde 2016, incluido este 2023, por más de seis millones de euros y una inversión global a lo largo de los últimos ocho años que se situó alrededor de los 12 millones de euros.

Se trata de unos apoyos muy demandados por el sector, prueba de ello es que en la última convocatoria hubo que ampliar el crédito inicialmente dispuesto y el número de beneficiarios ha ido aumentando de manera constante desde la primera convocatoria en 2016.

Mejora en las comunicaciones y radares, lo más demandado

Entre las actuaciones más demandadas en los últimos años se encuentran la instalación de antenas y equipos que permiten al propio barco disponer de una fuente de información y un flujo de datos para facilitar la navegación gracias al acceso a las redes de alta velocidad marítima de internet. Estos equipos también permiten a la tripulación disfrutar de conexión para los momentos de descanso y ocio y de mantener la comunicación con sus familias en tierra.    

También la dotación de radares y radiobalizas, la instalación de grúas y cabestrantes para facilitar el trabajo a bordo, modificaciones de cabinas o neveras y montajes de máquinas de hielo o potabilizadoras de agua. En el ámbito de la eficiencia energética y la mitigación del cambio climático se apuesta por la instalación de hélices de nueva tecnología y alto rendimiento y motorizaciones de bajo consumo.

Por último, para la disuasión de cetáceos fueron múltiples las inversiones destinadas a la adquisición de pingers acústicos que alejan a este tipo de mamíferos de los pesqueros.