La necesidad de ejercer su actividad, sea cual sea, de forma sostenible es algo que la mayor parte de las empresas ya no ponen en duda. Sin embargo, la incorporación de las políticas de sostenibilidad en la estrategia de la compañía, de forma que se genere una transformación corporativa real y efectiva, es aún hoy un reto para muchos.
Con el objetivo de valorar el punto en que las firmas se encuentran en este momento y debatir sobre los desafíos y necesidades de las empresas a la hora de abordar la sostenibilidad, la asociación de apoyo a personas con discapacidad Amicos y la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) han sumado esfuerzos para la organización de una jornada en Vigo.
El encuentro, que se celebrará el día 19 de marzo en el Hotel Attica21 busca profundizar en los criterios ESG (Environmental, Social and Governance), en los que tantas empresas están inmersos, y ahondar en la inclusión como una parte fundamental para el completo desarrollo de las estrategias empresariales sostenibles.
"La apuesta por las personas con discapacidad es el cierre perfecto al círculo de la sostenibilidad donde se daría cabida a todo el mundo", explica Keltoi Cameán Ouviña, director de desarrollo de personas y empresas de la asociación Amicos. Según su experiencia, "el 2% de cuota de reserva (a la contratación de personas con discapacidad para empresas de más de 50 trabajadores) no es todavía sufiente y la administración debería dar un paso adelante y marcarlo como obligatorio a la hora de optar a una licitación", reclama.
Para Keltoi Cameán, las empresas que apuestan por la inclusión suele tratarse de aquellas que "lo hacen por vocación, y no por obligación del mercado". En este sentido asegura que estas contrataciones requieren "tiempo y apoyos en todos los aspectos", por lo que la compañía "tiene que estar dispuesta a ello".
La pandemia aceleró las estrategias ESG
Con un claro lema de "personas que ayudan a personas" la asociación Amicos surgió hace más de 20 años de un grupo de padres y madres de personas con discapacidad intelectual preocupados por el futuro de sus hijos. Hoy, se han convertido también en aliados de las compañías que buscan un impacto social cercano y tangible y que creen que este, además, se verá reflejado en sus resultados corporativos.
Sobre si las compañías son cada vez más conscientes de la importancia de este impacto positivo en la sociedad, Keltoi afirma que la pandemia supuso una aceleración en la apuesta de las empresas por ser socialmente responsables con su entorno directo, y no solo por ofrecer un buen producto. "Esto hace que tanto los stakeholders de la compañía como su cliente final la perciban como una empresa responsable y les aporte un valor añadido en el mercado", cuenta.
Sin embargo, el mayor reto en materia de sostenibilidad y ESG, según apunta el director de desarrollo de personas de Amicos, sigue siendo el equilibrio entre la inversión y el retorno. "Las empresas deben elegir muy bien en qué ámbito deciden impactar para no ser vistas únicamente como socialmente responsables sino para que el producto o servicio que pongan en el mercado adquiera ese valor añadido".
En el evento del próximo martes se debatirán diferentes aspectos de la implantación de los criterios ESG y se visibilizará la importancia de no olvidar la parte de la sostenibilidad que tiene que ver con las personas que, además, se suma muchas veces a proyectos medioambientales de gran interés.
"Desde Amicos apostamos por el desarrollo de las personas con discapacidad intelectual en el ámbito medioambiental intentado realizar proyectos de regeneración del medioambiente con componentes de innovación social", cuenta Keitoi Cameán. "Este posicionamiento supone una magnífica solución y cierre de círculo de la sostenibilidad", concluye.