La viguesa Piratas de Nabia realizó entre sus empleados, previo al inicio de temporada, una formación específica para atender a personas invidentes en colaboración con la Organización Nacional de Ciegos de España (la ONCE). Tanto guías como personal de tripulación, patrones, logística y resto de departamentos centrales recibieron una formación específica que abarca desde el guiado a la seguridad a bordo.

Un grupo de más de 50 asociados de la ONCE procedentes de toda España, algunos de los cuales aterrizaron ayer en Vigo, disfrutaron de una ruta guiada a cargo de Piratas de Nabia. "Hemos trabajado con mis compañeras Montse y Sandra para conseguir que las rutas por la Ría de Vigo se desarrollen de manera accesible a todas las personas con discapacidad Visual, independientemente de su grado", explica la técnico de rehabilitación de la ONCE, Julia Fernández-Nieto.

La ruta guiada corrió a cargo de Diana Del Río que, además de narrar todo el entorno paisajístico, geográfico, industrial, natural y patrimonial, contó historias y aventuras de tesoros, piratas, leyendas y muchos de los secretos y maravillas de la ría. La guía oficial de Piratas de Nabia disfrutó la experiencia tanto como los propios excursionistas. "Hemos realizado una formación con ONCE para incorporar en las intervenciones de las guías mayores elementos descriptivos que ayuden a las personas con discapacidad visual a interpretar mejor aquello que no pueden percibir con la vista", explica Del Río.

La de ayer fue la primera experiencia conjunta ONCE-Piratas de Nabia y servirá como prueba piloto para recibir comentarios y consejos que se puedan incorporar a la formación de guías y marineros. Los visitantes, sorprendidos del movimiento del pantalán en el momento del atraque del barco, "encararon con muy buen humor toda la visita". Una de las excursionistas preguntó si el recién estrenado Cristo de A Guía también se iluminaba por la noche, en referencia a Vigo, su alcalde y la célebre ya iluminación de la ciudad.