El presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, y el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, mantuvieron este pasado lunes un encuentro "positivo y satisfactorio", según trasladaron los dirigentes. En la reunión se trataron múltiples cuestiones que competen a ambas administraciones, como las obras del nuevo Hospital Montecelo, la recuperación de la Xunqueira de Alba o un acuerdo para el cambio de titularidad de varias carreteras.

En total son tres los viales que pasarán a ser de propiedad municipal. Por un lado, la carretera vieja de Marín (PO-546), que será de dominio local en cuanto termine el proyecto de urbanización que actualmente está desarrollando el Gobierno autonómico; a ella se suma el trazado entre San Amaro y la rotonda de acceso a Montecelo y la ruta entre la avenida de Médico Ballina y el convento de San Bieito o el colegio de Lérez (sin determinar aún, como apunta el Concello pontevedrés).

Sobre otros asuntos, el presidente de la Xunta mostró su apoyo al proyecto de recuperación de la Xunqueira de Alba y reafirmó la disposición del ente regional a retirar de allí sus instalaciones: un edificio de la Consellería de Medio Rural se trasladará a Lalín y otro de la Consellería de Infraestructuras está pendiente de encontrar una nueva localización.

Obras del Nuevo Montecelo y otros asuntos

Alfonso Rueda trasladó al regidor de la Boa Vila que las previsiones fechan la conclusión de las obras del hospital Montecelo en un plazo inferior a un año. Además, explicó que la Xunta invertirá más de 10 millones de euros en crear un aparcamiento con casi 900 plazas y que contará con tarifas reducidas. La construcción de una cafetería supondrá una inversión de cuatro millones de euros, también a cargo del ente autonómico, y al igual que el parking, el desarrollo de su actividad se someterá a concurso público.

Asimismo, Lores hizo llegar al líder de la Xunta la demanda de ampliación del polígono de Campiño. Desde la administración regional apuntaron que en este momento esos trabajos afectarían a los gasoductos y zonas de protección de canales y restos arqueológicos, pero se comprometieron a estudiar el proyecto "en función de lo determinado en su plan sectorial" y "teniendo en cuenta" esos problemas.

En cuanto a la recuperación del Pazo de Lourizán o el convento de Santa Clara, Rueda afirmó que este año se prevé la adjudicación del concurso de ideas para la primera de estas infraestructuras. La redacción y ejecución del proyecto contará con 1,2 millones de euros de los presupuestos de la Xunta del próximo año. Sobre Santa Clara, la Xunta se encuentra a la espera de conocer los planes de la Diputación.