El alcalde de Vigo ha informado este viernes de que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha desestimado el recurso contra la sentencia que daba la razón al Concello en la decisión de que los arenales de A Foz y A Calzoa se dediquen a los perros. El fallo también condena a pagar las costas judiciales al apelante aunque no es firme, puesto que cabe recurso de apelación ante el Tribunal Supremo.

El fallo, en palabras del regidor, es "contundente" sobre la elección por parte del gobierno local para permitir la presencia de animales en las dos playas. "Confirma íntegramente la posición del Concello: no hay ningún daño al medioambiente".

La sentencia decreta que el Concello es plenamente competente para delimitar playas donde los perros puedan estar libremente acompañados por sus dueños y dice literalmente que "la normativa contempla la posibilidad de adoptar este tipo de delimitaciones en playas de zonas destinadas al esparcimiento canino, por lo que se trata de una decisión posible conforme al marco normativo legal".