La madrugada del lunes 12 de agosto de 2018, cuando se derrumbaba el muelle de madera del Paseo de las Avenidas durante la celebración de O Marisquiño, Enoque de Meneses, que regentaba el kiosco "O Buraco" de Montero Ríos, fue uno de esos héroes anónimos que supieron reaccionar ante la catástrofe. Habilitó las dependencias de su local para improvisar un hospital donde los equipos de emergencias tratasen a los heridos y repartió agua, hielo y alimentos entre las asustadas víctimas.
El pasado 28 de junio lo localizaron sin vida en su vivienda, después de varios días sin que nadie supiese de él. A punto de cumplirse un mes, su cadáver sigue a la espera de ser repatriado a su Bahía natal; ante la imposibilidad por parte de la Policía Nacional de localizar a sus familiares en Brasil, ahora su cuerpo aguarda a que el Consulado de Brasil dé respuesta a la petición del Juzgado de instrucción número 1 de Vigo.
Actor, humorista y showman
Enoque llegó a Vigo en el año 2000 como un completo desconocido, a pesar de que en Argentina, el país desde el que aterrizó en la ciudad, había hecho sus pinitos en televisión, en el programa de humor Videomatch, un clásico que estuvo en pantalla durante 15 años en el canal Telefe.
El sentido del humor y el gusto por las cámaras lo siguió cultivando aquí. Sin ir más lejos, en 2004, cuando el Barcelona visitó Balaídos, Enoque fue uno de los protagonistas. En el equipo azulgrana jugaba el holandés Davis, y el brasileño aprovechó su parecido físico con el futbolista para enfundarse la camiseta del Barça y sorprender a propios y extraños, con las cámaras de la TVG como testigos de excepción.
Tampoco perdió la oportunidad de aparecer en la televisión a nivel nacional. Lo hizo presentándose al talent show "Tú sí que vales", aunque el jurado, formado por Los Morancos, Noemí Galera y Àngel Llàcer, no le dieron el aprobado.
Gusto por las cámaras de televisión y también por las de cine. Enoque tuvo un pequeño papel en la película "Días azules", de Miguel Santesmases, interpretando a un marinero brasileño.
Después de más de 20 años de vida en Vigo, a Enoque solo le queda saber si será en su ciudad de adopción o en Brasil donde encuentre un lugar para descansar por fin en paz.