• Arde un autobús de Vitrasa en pleno centro de Vigo

Continúan las pesquisas sobre el incendio que devoró anoche por completo un autobús de Vitrasa en pleno centro de Vigo, a la altura de la farola de Urzaiz. La principal hipótesis de la Policía Nacional señala que el fuego fue provocado por un varón, que todavía no se ha podido identificar.

Los hechos ocurrieron en la noche del pasado domingo. Alrededor de las 22:30 horas comenzó el fuego "en la parte de atrás" del bus, según explican fuentes policiales, pero se desconoce por el momento si fue provocado por alguien que viajaba a bordo o un peatón. En cuanto comienzan las llamas, el vehículo fue evacuado y no hubo que lamentar daños personales.

El bus quedó completamente calcinado y la conductora fue trasladada al hospital tras sufrir un ataque de pánico. Las labores de los Bomberos se prolongaron hasta pasada la medianoche y una intensa humareda cubrió el centro de Vigo durante horas. El ejemplar de Vitrasa era uno de los nuevos modelos híbridos que adquirió recientemente la concesionaria.

Otro incendio en un autobús

El incendio en Colón no fue el único registrado este pasado domingo. Según informa Europa Press, poco antes de comenzar el fuego en el centro de Vigo hubo otro en un Vitrasa que se encontraba en la calle Tomás Alonso. También se cree que fue intencionado; presumiblemente, una persona prendió fuego a un asiento del autobús y fue el propio conductor quien apagó las llamas.

Vitrasa condena los hechos

La empresa concesionaria del transporte público de Vigo ha remitido a medios un comunicado en el que denuncia los dos incendios e informa de su colaboración total con la Policía Científica para "facilitar todo el material que necesiten para esclarecer las causas de lo sucedido". Además, detallan que ya han trasladado pruebas a los agentes.

Según explica Vitrasa en el comunicado, el incendio de la calle Tomás Alonso se produjo en un autobús de la línea C3 e iban seis usuarios a bordo. En el caso de Urzaiz, era un bus de la frecuencia 4A y llevaba en funcionamiento desde el 3 de marzo. La compañía ha calificado los hechos como "actos vandálicos de extrema gravedad" y ha lamentado que "pueden poner en riesgo la seguridad de los pasajeros y del personal".