La ciudad olívica acogió este viernes la primera edición del Encuentro Judicial Hispano-Luso, que reunió a magistrados españoles y portugueses. La cita, inaugurada por el presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Rafael Mozo, sirvió para repasar cuestiones de interés para el colectivo -como la independencia judicial o el estatuto del juez- y afianzar lazos.

Mozo, que destacó la "buena relación" y el "entendimiento" con la judicatura portuguesa; fundamentó la reunión en que "los sistemas judiciales portugués y español son muy parecidos, por lo tanto, la problemática que tiene Portugal y la que tenemos nosotros es prácticamente la misma, a nivel de consejos como CGPJ, mantener la independencia y velar por ella y defender y mantener el estatuto del juez".

En la misma línea, el presidente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), José María Gómez y Díaz-Castroverde, añadió que "nuestra intención es ahondar y aumentar nuestra gran relación con los jueces y juezas portugueses".

En el encuentro de este viernes también estuvo presente el presidente del Tribunal da Relaçao do Porto y presidente de la Unión Internacional de Magistrados, José Manuel Igreja Martins Matogueiras, y el director de la Escuela Judicial del Consejo General del Poder Judicial, Jorge Jiménez Martínez.

Continuidad del encuentro

Rafael Mozo anticipó la continuidad de este encuentro entre magistrados, el cual se prolongará durante todo este sábado. El objetivo es contribuir, tal y como señaló, a la interiorización dentro del sector de conceptos como "la especialización, la excelencia, la formación continua o la evaluación del desempeño". Además, el servicio judicial "debe ser ágil, eficaz y transparente", añadió en este extremo el presidente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.

Por otro lado, Gómez y Díaz-Castroverde recalcó que, para que la modernización de la justicia sea una realidad, son "indispensables" las nuevas tecnologías, y puso en valor el hecho de que España y Portugal "estén a la cabeza de Europa" en este sentido.

Por último, también se puso encima de la mesa la importante de dotar al sistema de un mayor número de jueces y de juezas. En España, el dato es de 11 por cada 100.000 habitantes, mientras que en Portugal hay 20 por cada 100.000 habitantes.