Un hombre se enfrenta a una pena de un año de prisión como supuesto autor de un delito de revelación de secretos por haber publicado fotos y vídeos sexuales de su expareja. La víctima ha declarado este jueves ante el Juzgado de lo Penal número 1 de Vigo que el acusado le presentó un contrato para poder llevar a cabo estos hechos pero que ella se negó a leerlo y firmarlo.

Tal y como expone Europa Press, la víctima ha relatado que el varón le explicó que el documento era para subir sus fotos a Internet; aunque el contenido sexual sí lo hicieron con el consentimiento de ambos, ella ha señalado que no sabía que las imágenes íntimas se habían publicado en la red. Precisamente fue en sede judicial, durante un juicio rápido por una denuncia previa contra el acusado, cuando se enteró.

Una amiga que la acompaña aquel día escuchó al abogado de su expareja decirle que borrarse unas fotos cuanto antes. De este modo, empezaron a buscar en páginas web y redes sociales para adultos perfiles del acusado hasta que encontraron dos cuentas de OnlyFans donde había contenido sexual de ella.

Según ha expuesto la víctima, tuvieron que pagar una suscripción para acceder a él y descargar las imágenes, que llevaron a la policía. Su amiga y el novio de este confirmaron los hechos y alegaron que la ayudaron, pues ella se encontraba en aquel momento en estado de "shock".

Daños morales

La abogada de la víctima ha lamentado en sus conclusiones finales las consecuencias que ha generado la situación para su clienta. En primer lugar, tuvo que estar en tratamiento por depresión y todavía lo está por ansiedad. Además, ha defendido que los hechos le habrían generado una merma en su trabajo relativo a su imagen, ya que había participado en películas y en campañas publicitarias previamente.

Por su parte, la abogada del acusado ha asegurado que no ha quedado acreditado ni el perjuicio profesional ni que las patologías sufridas por la víctima tengan relación con los hechos, ya que no ha acudido al juicio ningún profesional para corroborarlo.

Hechos

Según el escrito de acusación de la Fiscalía, recogido por Europa Press, los hechos ocurrieron entre junio de 2021 y julio de 2022, cuando acusado y víctima mantuvieron una relación de pareja. Mientras eran novios, él grabó vídeos y sacó fotos de ella (también de momentos íntimos) con el consentimiento de los dos, pero ella no permitió que esas imágenes se hicieran públicas.

Antes de cortar la relación, el acusado publicó unas fotos en uno de sus perfiles de Instagram en la que se veía a su pareja desnuda o en ropa interior, con un enlace que dirigía a una web de contenido sexual, en la que publicó más fotos y vídeos sexuales de la víctima.

La mujer se enteró de estos hechos precisamente estando en sede judicial, cuando estaba en un juicio rápido debido a una denuncia previa contra el acusado. La Fiscalía pide para el acusado un año de prisión como supuesto autor de un delito de revelación de secretos y que indemnice a la víctima en 5.000 euros por daños morales.