La aparición de un vertido en el río Lagares, que lo tiñó de blanco a la altura de su paso por la Avenida de Madrid este domingo, ha hecho saltar las alarmas y desde el BNG de Vigo han solicitado que se refuercen las medidas de control para que no se repitan este tipo de casos.

El portavoz nacionalista, Xabier P. Igrexas, ha demandado al Concello que "movilice más medios materiales y humanos para evitar que el Lagares continúe siendo utilizado como una gran cloaca". Por esto, ha reiterado la propuesta de la puesta en marcha de un sistema de telecontrol que permite comprobar en tiempo real los cambios en la calidad del agua y también identificar el origen de los vertidos; un sistema similar al que se puso en marcha en 2006, hoy inoperativo "por falta de mantenimiento".

Además, Igrexas señala los vertidos potencialmente contaminantes que se producen en "lugares de sobra conocidos por el Concello, ligados en muchos casos a industrias instaladas en las proximidades del propio río", además del vertido de "millones de litros de aguas sin depurar que se repiten cada año a consecuencia de los llamados 'alivios técnicos' desde la estación depuradora del Lagares y otros puntos de la ciudad".

"El río Lagares tiene que dejar de ser un gran vertedero y convertirse en el verdadero pulmón azul y verde de nuestra ciudad", ha reivindicado Igrexas. Desde el BNG, recuerdan que es el río gallego que vierte más materiales plásticos al mar, según un reciente estudio de la organización The Ocean Cleanup, que remarca que 9 de cada 10 toneladas de plástico que cada año acaban contaminando la ría de Vigo, tienen origen en el Lagares. 

Desde el Concello, señalan que hoy no queda en principio rastro del vertido que, "según se sospecha", sería de "pintura", aunque remarcan que es a la Xunta a la que le corresponde informar e investigar porque "el río es de su competencia" y "las sanciones también son autonómicas".