Desde el pasado 1 de julio, los vigueses y viguesas con movilidad reducida pueden disfrutar cómodamente de un baño en las playas de Samil y el Vao gracias al servicio de accesibilidad que dota a ambos arenales de sillas anfibias. Abel Caballero explicó este lunes que el servicio estará disponible hasta el próximo 15 de septiembre y que cuenta con cinco personas que ayudarán a los usuarios a llegar hasta el agua haciendo uso de las sillas y de muletas adaptadas.
El servicio, que permite facilitar el acceso a la orilla de las personas con movilidad reducida, está operativo de 11:00 a 14:00 horas y de 16:00 a 20:00 horas y también ofrece la posibilidad de utilizar las sillas libremente a entidades que dispongan de técnicos propios. "La discapacidad no puede ser una limitación", aseguró el alcalde.
Asimismo, desde hoy se pueden solicitar en los puestos de socorrismo de las playas viguesas las pulseras identificativas para niños y niñas, para incrementar la seguridad de los menores en los arenales. Las pulseras, que pueden utilizarse durante varios días, llevarán el nombre del pequeño y el contacto de su padre, madre o de la persona con la que estén en la playa en ese momento. El alcalde, no obstante, ha recordado la importancia de prestar atención a los niños "en todo momento, porque al primer despiste se pueden perder".