Desde Galicia a las Antípodas, el mundo entero se encuentra repleto de lugares realmente extraordinarios que merece la pena visitar por su rareza y exuberancia, así como descubrir la historia o razón de ser detrás de estas curiosas geolocalizaciones. De hecho, existe una página web que recoge este tipo de rincones y desgrana su esencia a través de un mapa interactivo que sitúa en la actualidad alrededor de 25.500 lugares insólitos repartidos por todo el planeta ―con más de 700 ubicaciones en España. Hablamos de Atlas Obscura, un proyecto que lleva desde el año 2009 recopilando en su base de datos los lugares visitables más extraños del mundo de una manera similar a la de Wikipedia, ya que los usuarios pueden colaborar y editar las entradas de estas auténticas joyas mundiales. 

Lo cierto es que la épica es uno de los grandes parámetros de esta web donde los usuarios podrán descubrir desde tétricas islas de muñecas como la ubicada en los canales Xochimilco, en el sur de Ciudad de México, hasta misteriosos lagos rodeados de esqueletos humanos tal y como ocurre con la laguna india de Roopkund, situada en pleno Himalaya. En el caso particular de Galicia, la región acumula en torno a una veintena de localizaciones catalogadas por Atlas Obscura, hasta cinco de ellas ubicadas en las Rías Baixas. Entre los rincones gallegos que destacan los viajeros de la web se encuentran algunos como la única capilla en el mundo cubierta por conchas de vieira o una antigua batería militar que esconde entre sus ruinas más de 200 metros de misteriosas galerías.

Iglesia de las conchas de A Toxa (O Grove)

El patrimonio religioso es una constante en las Rías Baixas. Monasterios, catedrales, capillas y santuarios históricos se reparten por toda el área desde la costa hasta el interior. Sin embargo, una de las iglesias más singulares de toda la provincia de Pontevedra se encuentra en la pequeña Illa da Toxa, situada en O Grove. Se trata de la Capilla de San Caralampio, más conocida en toda Galicia como la capilla de las conchas. Este templo meco, construido en el año 1909, se cubrió de conchas de viera por primera vez a principios de los años cincuenta con el objetivo de aislar el interior de las humedades. Desde Atlas Obscura destacan la belleza de la capilla en las distancias cortas y el aire marinero de la misma: "de cerca se revela que está cubierta desde el suelo hasta la torre con conchas locales que le dan una apariencia blanca similar a una teja". 

Isla de San Simón (Redondela)

Enmarcada en el corazón de la ría de Vigo, la ensenada de San Simón conforma uno de los rincones menos concurridos y con más encanto de las Rías Baixas. Se trata además de un espacio natural protegido que alberga entre sus límites un importante patrimonio histórico, natural y paisajístico. En mitad de este escenario se alza la pequeña isla de San Simón, un oasis verde de presente bucólico y cultural y con un pasado de lo más atroz que se encuentra también incluido en el mapa de Atlas Obscura en las Rías Baixas. De hecho, desde la web destacan la "larga y sangrienta historia" de la pequeña y exuberante isla redondelana.

Relatos de Caballeros Templarios, sectas religiosas, piratas y corsarios se entrelazan con el transcurrir de los siglos. "San Simón fue testigo de numerosas batallas navales y fue utilizada como escondite de valiosos cargamentos", escriben en la web. "también albergó una estación de cuarentena para personas con enfermedades contagiosas graves (…) presos políticos de toda España fueron recluidos en el campo, donde fueron sometidos a condiciones de vida inhumanas y ejecuciones", agregan. Sobre su historia más reciente, Atlas Obscura escribe sobre la conversión de San Simón en la "Isla del Pensamiento", destinada a honrar su pasado e inspirar un "pensamiento más profundo y creativo".

Batería militad de Cabo Silleiro (Baiona)

Justo en la costa sur de la desembocadura de la ría de Vigo, situada en los montes de Baredo en Baiona, la batería militar J4 de Cabo Silleiro es otra de las localizaciones singulares destacadas en el proyecto de Atlas Obscura en Galicia. Este antiguo complejo militar en estado ruinoso mantiene su semblante a través de varios edificios, cañones y túneles que se mantienen intactos tras varias décadas de inactividad. Las instalaciones en cuestión se construyeron tras el final de la Guerra Civil con el objeto de vigilar y proteger la ría de Vigo y la bahía de Baiona de posibles incursiones enemigas. 

El final de su historia llegaría en el año 1998, sumida desde entonces en un estado de completa ruina y abandono por el cual se desaconseja la visita al interior de las estructuras y galerías. De hecho, esta antigua batería militar esconde más de 200 metros de pasadizos subterráneos que en su día conectaban con los diferentes cañones y otras áreas de almacenamiento.  "La batería estaba equipada en su parte inferior con dos cañones navales británicos de un acorazado que se hundió en 1923. Años más tarde se les unió un tercer cañón", explican en la web. "Ahora sus numerosos cañones largos están oxidados y abandonados, conectados por una serie de intrigantes túneles subterráneos".

Castro de Baroña (Porto do Son)

La historia y naturaleza mágia de Castro de Baroña también ha logrado conquistar el mapa interactivo de Atlas Obscura en las Rías Baixas. Este antiguo asentamiento de la Edad de Hierro constituye uno de los castros más emblemáticos y mejor conservados de toda Galicia e incluso de la Península Ibérica. Una de las características que hacen especial a este castro es su ubicación, situado en un enclave natural privilegiado rodeado del mar y con vistas a una de las mejores playas de España. Lo más curioso del castro de Porto do Son es que es uno de los pocos poblados que basaban su economía de subsistencia en la producción marítima y agrícola. Por lo general este tipo de asentamientos celtas trataban de emplazar en una localización estratégica que tuviese unas condiciones mínimas tanto defensivas como para una calidad de vida óptima. En el caso particular de Castro Baroña no es así y lo cierto es que son muchos los expertos que creen que el recinto amurallado de este yacimiento responde más bien a razones de conservación del espacio que a un motivo defensivo. 

Molinos de Folón e Picón (O Rosal)

Al sur de la provincia de Pontevedra, en la comarca do Baixo Miño, la localidad de O Rosal esconde a ojos de Atlas Obscura uno de los lugares más singulares del mundo: los molinos de Folón e Picón. Este conjunto de 60 molinos documentados ya en el siglo XVIII sorprenden a los intrépidos viajeros de la web por estar "construidos en pequeñas líneas perfectas que caen en cascada por las laderas ―del monte Campo do Couto― con una ingeniosa simetría nacida de la conveniencia". Se trata además de un legado característico del rico patrimonio etnográfico de esta comarca fronteriza del sur de Galicia y de hecho el conjunto se encuentra catalogado como Bienes de Interés Cultural. "Si bien el valor estético de tal construcción es evidente, la razón real de su diseño es que cada molino puede aprovechar la misma corriente, uno tras otro", apunta también en la descripción de estos curiosos molinos gallegos. 

Otras localizaciones en Galicia

Más allá de las Rías Baixas, el grueso de la geografía gallega esconde un gran número de rincones extraordinarios que podrían entrar a formar parte del catálogo infinito de Atlas Obscura. En la actualidad, la comunidad suma cerca de una veintena de lugares extraordinarios a ojos de los internautas de la página web entre los que queremos destacar otras cuatro ubicaciones: la Casa das Pedriñas de A Veiga (Ourense), la Ciudad de los Muchachos en Bemposta, el Peregrino de las Sombras en Santiago de Compostela y La Trufa en Dumbría (A Coruña).

 La Casa das Pedriñas, también conocida como "Casa do Bailarín", es una vivienda muy singular que fue cubierta de pequeñas piedras de colores a lo largo de casi 30 años por el escultor y pintor Daniel Mancebo, el cual se ganó a pulso el apodo del "Gaudí de A Veiga". De hecho, la intención de este artista era hacer un homenaje al famoso arquitecto catalán de la Sagrada Familia y reproducir el estilo modernista del mismo. En el caso de la Ciudad de los Muchachos, la historia nace del abandono de la segunda escuela de circo más grande del muno. Por su parte, La Trufa de Dumbría ("The Truffle") se corresponde con una casa experimental (o proyecto de arte/unidad de vivienda sostenible) que se creó inundando una colina de tierra con hormigón. Por último, la Sombra del Peregrino es un juego de luces accidental que hace que se poryecte la sombra de un peregrino sobre uno de los muros de la Catedral de Santiago.