Niño Corvo: la cocina más sinvergüenza de Vigo llega hasta tu casa
Una carta atrevida, producto fresco y muchas ganas de cocinar son lo que hacen especial a este jovencísimo chef vigués
13 diciembre, 2020 06:00Adrián Albino es un joven con mucha ilusión y una gran pasión por la cocina. Como gallego orgulloso, el centro de sus platos siempre es el producto local, que prepara con técnicas modernas y recetas que nada tienen que ver con la tradición.
El pescado es el pilar básico de su carta junto con el marisco y los moluscos, todo ello siempre fresco. Por esto la carta cambia bastante a menudo, prácticamente a diario, y también porque el chef dice que su cocina se basa casi siempre en la improvisación.
Ahora han tenido que elaborar una carta algo más estable para el servicio take away, disponible en toda la ciudad de Vigo. Una larga selección de peixe crú ("pescado crudo") elaborado con recetas asiáticas acompaña a una oferta muy surtida capaz de despertar cualquier apetito.
Cociña sen vergoña
En 2017 un local del barrio de O Berbés abría sus puertas, en una zona casi recóndita, al inicio de la calle San Francisco. Con la intención de revivir un barrio no muy concurrido, el cocinero vigués rehabilitó una antigua tasca para convertirla en un local minimalista y abierto a paladares curiosos.
Adrián se define a sí mismo como un chef sinvergüenza, capaz de hacer mezclas imposibles improvisando platos que no siempre repite. La pasión que mueve al cocinero es la clave para que todo lo que toca se haga de oro: "el único secreto es disfrutar haciendo tu trabajo", dice.
El aprendizaje en el restaurante Abastos 2.0, sito en el Mercado de Santiago, imprimió en Adrián un extremo respeto por el producto y la cocina "de mercado", aquella que cambia la carta según la compra del día. Es por eso que sus pescados "casi no se tocan", se presentan al comensal prácticamente crudos o ligeramente marinados, para que el género sea el protagonista del plato.
Su carta de vinos también está cuidadosamente elegida, para maridar sus peixes con excelentísimos caldos de la tierra. Por ello predominan los blancos, aunque también se cuela algún tinto e incluso espumosos y vinos dulces portugueses.
Un servicio delivery que implica al cliente
Como a todos los cocineros españoles, este año 2020 le ha tocado lanzar un servicio delivery, que ha resultado ser todo un triunfo en la ciudad. Pero el éxito de su servicio a domicilio no solo radica en la carta (que es una absoluta delicia), sino que ha decidido darle una "vuelta de tuerca" a su falta de vergüenza y obligar a sus clientes a cocinar un poquito.
Con el fin de que el plato llegue perfecto hasta la boca del comensal, Adrián decidió que lo mejor era que él mismo acabase de prepararlo. Los pedidos no siempre incluyen recetas "inacabadas", pero de vez en cuando el chef envía los ingredientes por separado para que sea quien lo va a comer el que lo acabe de montar.
Gracias a vídeos en sus redes sociales, el propio cocinero explica cómo terminarlos, y así implica al cliente y evita que determinados platos lleguen "feos" a casa. Por ejemplo, lo hace para mantener las láminas de su milhojas crujientes, enviando por separado la crema metida en una manga pastelera. Así, al montar el postre en casa conservará ese punto crujiente y tendrá todos los matices que debería tener si lo comiésemos en el restaurante.