En la calle Arenal número 40 se encuentra Galanga, un local de platos saludables en pleno corazón de Vigo. El proyecto nace en noviembre de 2022 de la mano de Fernando Jiménez, un emprendedor vigués que decidió cambiar su negocio de Crossfit por este restaurante. El propietario explica que llevaba varios años dándole vueltas al proyecto, inspirado por sus viajes por diferentes ciudades de Europa para ofrecer una alternativa sana y con productos lo más locales posibles. "Lo que quería era traer un concepto diferente a la ciudad de Vigo", explica Fernando. Además, para el propietario, uno de los puntos fuertes de Galanga es que se encuentra muy cerca de un gimnasio, por lo que los usuarios tienen un punto de sinergia entre ambos establecimientos.

Galanga es un proyecto basado en productos de alta calidad, sin procesados y cocinada exclusivamente en el restaurante que pretende servir de alternativa para comer saludable y cuidar la alimentación a pesar de comer fuera de casa. En palabras de Fernando, lo que diferencia al establecimiento del resto de ofertas gastronómicas de la ciudad es su apuesta por los "productos artesanos, sin ningún tipo de químicos y de alta calidad, que además hacemos todos nosotros".

Ahondando en el concepto de comida saludable, todos los platos del restaurante se cocinan al horno o a la plancha, acompañado con diversas especias que potencian y elevan el sabor de los productos. "Nosotros creemos que con la calidad del producto y cómo lo trabajamos hacemos que sea rico y escapamos de la concepción insípida que se tiene de la comida saludable", comenta el propietario.

Productos locales e ingredientes frescos

La oferta gastronómica de Galanga se centra en tres pilares fundamentales: un mostrador con bollería, la carta de brunch y el plato Galanga. La bollería del mostrador es el único producto que no se crea en el restaurante, si no que se lo encargan al Forno Domaio, un obrador en Moaña que desde hace 40 años se dedica a la panadería y la pastelería. Además de la bollería, los panes de Galanga también son producidos en el Forno Domaio, que hace el pan brioche especialmente para ellos.

En el mostrador del local de brunch también se pueden adquirir tartas hechas en el propio local como la carrot cake o la tarta de chocolate. La repostería es la única oferta culinaria del establecimiento en la que se pueden encontrar grandes cantidades de azúcar, ya que como explica Fernando tienen "que tener un equilibrio y ofertar de todo y para que el cliente pueda tener un cariño consigo mismo cuando se quiera tomar algo menos saludable".

La opción más completa de la carta es el brunch (la opción de desayuno), ya que cuenta con variados platos entre los que elegir como bowls, tostas, huevos cocinados de formas diversas y sándwiches. En el restaurante también cuentan con varias opciones veganas.

Por último, el plato Galanga es una opción personalizable para que cada cliente pueda adaptarla lo máximo posible a sus necesidades. De esta forma, el plato ofrece la opción de elegir entre diferentes fuentes de proteínas (como el pollo, el salmón, el falafel o la croca) y guarniciones (que pueden ser arroz, patata gajo, quinoa o batata). Además los platos se ofrecen en diferentes tamaños que pueden ser elegidos por el consumidor.

Galanga abre de lunes a domingo (con la única excepción del martes, que permanecen cerrados), en horario de mañana de 08:30 a 15:00 horas y en horario de tarde desde las 20:00 hasta las 00:00 horas.