Valencia

El Gobierno Valenciano anunció este martes el nombramiento de Mar Chao López como presidenta del Puerto de Valencia. La dirigente escogida por el presidente autonómico, Carlos Mazón, tendrá como principal reto desatascar el proyecto de ampliación norte del recinto portuario, que lleva cuatro años en el cajón.

"Se ha estado buscando a la mejor candidata, cuando veáis su currículum, veréis que ha sido una gran elección", explicó al respecto la portavoz del Gobierno valenciano, Ruth Merino.

Chao, en efecto, es una dirigente de contrastada trayectoria, exdirectora de Explotación de Puertos del Estado y, hasta ahora, jefa de Desarrollo Comercial y de Negocios de la Autoridad Portuaria de Valencia. En la empresa privada, fue la responsable de Transporte Multimodal de Inditex.

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Como informó este periódico, la multinacional italosuiza MSC lleva cuatro años esperando a la administración pública para invertir 1.021 millones. Son los que corresponden al capital privado de la ampliación norte del Puerto de Valencia, de la que MSC es la virtual adjudicataria.

La Autoridad Portuaria de Valencia (APV) dio luz verde a culminar este proyecto en septiembre de 2019, pero el Gobierno de Pedro Sánchez no la ha adjudicado desde entonces.

El sector da por hecho que el Gobierno, mientras esté en funciones, "no va a mover un papel", ni mucho menos consignar los 542,7 millones de euros correspondientes a la inversión pública del proyecto. Teme además que una mayor "injerencia catalana" -si revalida el Ejecutivo con el respaldo de los independentistas catalanes- postergue todavía más la iniciativa.

Los trámites para la creación del nuevo gran muelle se activaron con el único voto en contra del entonces alcalde de Valencia, Joan Ribó. Pareció un mero posicionamiento político, pero activó una escalada de oposición al proyecto, abanderada por Compromís y Podemos, que disparó el temor de los socialistas, incapaces de culminar el proceso desde entonces.

Las formaciones a la izquierda del PSOE se incorporaron al debate con la ampliación ya construida. El dique de abrigo de la misma se construyó en 2012 y costó 203 millones de euros. Su impacto en las playas del sur de la ciudad, en consecuencia, se produce desde esa fecha. Pero no fue hasta 2019, cuando MSC abanderó la construcción del muelle interior, cuando afloró la oposición a la infraestructura.

Ambos partidos, con la entonces vicepresidenta Mónica Oltra como máximo exponente contra el crecimiento del puerto valenciano, reclamaron una nueva Declaración de Impacto Ambiental (DIA), al considerar que la existente, que data de 2007, no se corresponde con el proyecto final de MSC.