Natalia, en febrero con su bebé muerto en brazos. Bioparc

Natalia, en febrero con su bebé muerto en brazos. Bioparc

Valencia

El desgarrador duelo de una chimpancé del Bioparc: abraza el cadáver de su bebé desde hace meses

La escena sorprende a los visitantes por la avanzada descomposición del pequeño, pero el parque explica que debe respetar los tiempos de la madre.

3 mayo, 2024 15:24
Valencia

Una desgarradora escena sorprende sobremanera a los asistentes del Bioparc Valencia. Se trata de Natalia, una hembra de chimpancé del zoológico, que porta en sus brazos el cadáver de su cría, fallecida hace ya varios meses. El pequeño se encuentra en avanzado estado de descomposición, hasta el punto que es ya prácticamente un esqueleto.

El Bioparc de Valencia informó con transparencia en febrero sobre esta situación, que se prolonga desde entonces. El pasado 1 de mayo, día de gran afluencia a las instalaciones por la festividad del Día del Trabajador, la chimpancé avanzó con el cuerpo sin vida hacia el público asistente, que solo pudo adivinar qué portaba al contemplar de cerca el cráneo del pequeño ejemplar. Pertenece a la subespecie Pan troglodytes verus, en peligro de extinción.

Una empleada del Bioparc se encargó de explicar su comportamiento a quienes preguntaron por la dolorosa imagen, en línea con lo comunicado hace meses por el parque. "Natalia y el grupo están de duelo. Ha de desprenderse ella del cuerpo de forma voluntaria. Si la forzara un cuidador, podría perder la confianza generada durante muchísimo tiempo. Debemos respetar sus tiempos", exponía.

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"La cría nacida a principios de mes ha fallecido, y el equipo técnico del parque valenciano está aportando la máxima tranquilidad a los chimpancés en su natural periodo de duelo", indicó el Bioparc el 16 de febrero en un extenso comunicado, acompañado de un vídeo divulgativo.

"Se trata de un grupo muy cohesionado, centrado ahora en mantener el óptimo desarrollo del otro bebé que pronto alcanzará un mes de vida, apoyado por la presencia del pequeño Djibril, de 4 años", agregaron. La comparativa entre el bebé vivo y el fallecido permite a los asistentes constatar la descomposición que ha sufrido.

El zoo expuso que, "pese a que los datos revelan una elevada mortandad en crías de chimpancés de tan corta edad, se trata de un hecho desolador". "Se trata de una especie donde los vínculos sociales y la cohesión del grupo son fundamentales, por lo que todos los miembros se ven afectados por estos tristes acontecimientos", indicaron.

"Necesitan un periodo de duelo, y poco a poco asumen la realidad y la pérdida, aunque la madre puede todavía precisar un tiempo para, incluso, desprenderse del inerte cuerpo", auguró con acierto el parque.

Desde el nacimiento, a principios de febrero, "el protocolo de seguimiento se activó con mayor intensidad en este caso, pues Natalia, la madre, ya había perdido una cría en 2018".

"Se estableció el contacto con el grupo de expertos internacionales y, además de la observación directa, se han utilizado intensivamente vídeos y fotografías de detalle para comprobar si la crianza se estaba produciendo correctamente. Las ubres presentaban poco volumen, pero los pezones y el acto de mamar de la cría evidenciaban la alimentación", precisó.

Según el Bioparc, el bebé mostró una actividad normal hasta el día previo a su muerte, "instante en el que se realizó la muy limitada intervención posible en estas circunstancias", pero que no logró evitar el fatal desenlace.

En peligro crítico

Los Bioparc de Fuengirola y Valencia albergan el grupo más numeroso de España de chimpancés de la subespecie Pan troglodytes verus, en peligro crítico de extinción según la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y tienen un papel destacado en el programa europeo para su protección (EEP).

En ese sentido, las decisiones deben tomarse de forma consensuada con las personas responsables del proyecto y teniendo en cuenta las dificultades y características de esta peculiar especie. "Pese al sentimiento de impotencia, la realidad es que la actuación solamente posibilita aportar medicación, pues arrebatar a la cría de la madre implicaría una peligrosísima anestesia a varios miembros del grupo y poner en grave riesgo la vida de los dos recién nacidos", indicaron.

"Los animales que albergan centros como Bioparc no son mascotas ni están domesticados. El objetivo es la preservación de la especie aportándoles el máximo bienestar y, al mismo tiempo, favoreciendo su comportamiento e instinto natural", argumentaron desde el zoológico.

Por ello, abogaron por "asumir la parte más trágica, por muy desgarradora que sea para las personas". "Ahora los esfuerzos se centran en aportar la mayor tranquilidad posible al grupo, con la certeza de que ya han superado situaciones similares. Y también la ilusión de ver crecer a los pequeños sabiendo que representan esperanza para la supervivencia de su especie", concluyó el recinto.