El presidente valenciano, Carlos Mazón, junto al presidente de Stadler Valencia, Íñigo Parra. EE

El presidente valenciano, Carlos Mazón, junto al presidente de Stadler Valencia, Íñigo Parra. EE

Economía

Stadler, la fábrica valenciana de trenes que ha triplicado su plantilla en seis años: de 800 a 2.600 trabajadores

El grupo suizo se ha convertido en un inesperado líder industrial de la Comunitat Valenciana tras los problemas en Ford Almussafes.

22 julio, 2024 03:18
Valencia

De 800 a 2.600 empleos en solo seis años. Más del triple de plantilla. Es la asombrosa evolución de Stadler, el inesperado líder industrial valenciano. Ford Almussafes tendrá 4.200 trabajadores cuando concluya su último ERE. La gigafactoría de baterías del Grupo Volkswagen aspira a crear 3.000. Y con mucho menos protagonismo mediático, la fábrica de trenes de Albuixech se ha convertido en un referente de la misma envergadura.

El complejo negocio de la producción de trenes y locomotoras alterna periodos de gran demanda y empleo con otros de menor actividad. Por eso, al enorme crecimiento experimentado en los últimos años por Stadler Valencia le acompañaba siempre un 'pero'.

¿Qué ocurrirá cuando la fábrica acabe de atender grandes pedidos como el de mil millones que se adjudicó por parte de Adif hace ahora tres años? La firma empezó 2019 con apenas 800 trabajadores. El temor era regresar a esos volúmenes cuando fuera completada la comanda de Adif

La dirección de la factoría, filial de la multinacional suiza Stadler Rail -antes lo fue de Vossloh y de Alstom-, lleva años en busca de carga de trabajo para paliar los valles productivos propios de su actividad. Y la pasada semana anunció una adjudicación que supone un auténtico cambio de paradigma para la compañía y para todo su ecosistema industrial.

La matriz, Stadler, se había adjudicado el megacontrato del proyecto denominado VDV-Tram-Train. Lo impulsaba un consorcio de seis operadores de transporte de Alemania y Austria y suponía un pedido inicial de 246 convoyes Citylink, con un volumen aproximado de 1.700 millones de euros; y la opción de adquirir hasta 258 unidades adicionales que pueden tener un valor superior a los 2.300 millones.

Estaba claro que Stadler Valencia iba a jugar un papel importante en la producción de estos vehículos, porque el Citylink es el producto estrella de la factoría valenciana. No obstante, la política de la empresa consiste desde hace años en repartir la producción de sus grandes pedidos en, al menos, dos fábricas del grupo. Con ello busca evitar la dependencia de un solo centro de trabajo y, precisamente, lograr cargas de trabajo y plantillas estables en todos ellos.

Pero, en esta ocasión, Stadler ha apostado por concentrar en Valencia la abultada comanda. El resultado es una gran adjudicación que fue anunciada por el presidente valenciano, Carlos Mazón. "Stadler Valencia ha conseguido la fabricación, con talento y tecnología de la Comunitat Valenciana, de 504 tranvías de última generación por valor de 4.000 millones de euros", manifestó el dirigente.

El mayor de su historia

Se trata del contrato más grande logrado por el grupo suizo Stadler en toda su historia y una de las licitaciones ferroviarias más importantes de Europa, según el comunicado conjunto remitido por la empresa y el Gobierno autonómico. La adjudicación contempla, además de la fabricación, el mantenimiento de los vehículos en la planta valenciana.

Stadler Valencia cuenta en la actualidad con más de 2.000 trabajadores en nómina. Se estima además que genera unos 6.000 indirectos. La pregunta era obligatoria: ¿Va a disparar el nuevo megaencargo la plantilla? La respuesta es sorprendente: no. Es cierto que la elevará a 2.600 trabajadores. Pero el verdadero valor que aportará esta gran comanda es la estabilidad de ese empleo, porque el encargo prevé un largo periodo productivo. Durará una década.

Así lo verbalizó el propio presidente Mazón. "Con este acuerdo se garantiza la estabilidad del empleo durante los próximos 10 años", dijo.

El presidente autonómico tuvo mucho protagonismo en el acto. Allí anunció un plan plurianual de incentivos que la Generalitat concederá a Stadler, "orientado al incremento de la capacidad de producción, el desarrollo de nuevos productos, la mejora de los procesos, así como la implementación de soluciones tecnológicas avanzadas en la Comunitat Valenciana".

Carlos Mazón estrecha la mano a Íñigo Parra, presidente de Stadler Valencia. EE

Carlos Mazón estrecha la mano a Íñigo Parra, presidente de Stadler Valencia. EE

Fuentes conocedoras de la negociación revelan al respecto que la existencia de este plan ha sido determinante para que Stadler haya apostado por concentrar en Valencia la producción del nuevo gran pedido.

El Gobierno autonómico ya está trabajando en la redacción del nuevo decreto de incentivos, que contará con un presupuesto de 45 millones de euros para los próximos 10 años. Con el mismo, Stadler accede a la categoría de empresas como las mencionadas Ford o PowerCo (filial de Volkswagen) que reciben ayudas millonarias de la Generalitat por el valor añadido para el territorio de sus proyectos vinculados a la innovación y al empleo industrial

Para Mazón, el contrato logrado por Stadler "es una muestra de la confianza en la trayectoria, el talento y la tecnología de la Comunitat Valenciana". El Citylink es un modelo de tren 100% valenciano, diseñado y desarrollado en la planta de Albuixech, y que ya funciona en la conexión entre Alicante con Benidorm y Dénia a lo largo de la costa. 

Además de la fábrica principal en Albuixech, dispone de una nueva factoría en La Vall d’Uixó con un centenar de empleados y un nuevo centro logístico en Sagunto, desde donde centraliza todas sus operaciones logísticas.