Mañana se cumple un año desde que los ciudadanos dieron su apoyo al proyecto del PP y convirtieron a María José Catalá en alcaldesa de Valencia. 365 días que han servido para darle la vuelta a la ciudad.

Queda mucho por hacer, pero en apenas doce meses, la alcaldesa y todo el equipo municipal hemos demostrado que se pueden hacer más y mejores las cosas en esta ciudad.

Si tuviera que resumir con una palabra este primer año, sería 'cumplimos'. Hemos cumplido con nuestros compromisos con los ciudadanos y ciudadanas de Valencia que confiaron en el proyecto de María José Catalá para devolver a la ciudad el liderazgo y protagonismo que merecen.

No se trata de ser complacientes, pero si reconocer que durante este tiempo todos mis compañeros, con la alcaldesa a la cabeza, hemos trabajado sin descanso por y para los vecinos de la ciudad y ahí están los frutos.

Cumplimos el compromiso de bajar los impuestos a toda la ciudadanía, sin distinciones, con un ahorro de más de 70 millones de euros; cumplimos con la puesta en marcha de un plan de choque de limpieza, aumentando un 50% el baldeo e incorporando más de un millar de trabajadores; y hemos cumplido reordenando con criterios técnicos el tráfico de la ciudad, garantizando la seguridad de los viandantes, vehículos y bicicletas.

Cumplimos reordenado y ampliado las líneas de la EMT, que ha registrado un récord histórico de viajeros, casi 400.000 personas al día y hemos recuperado también las líneas que llegan al centro de la ciudad.

Hemos cumplido sacado del cajón más de 22.500 licencias paralizadas que frenaban importantes inversiones para la ciudad y lo que es peor, ahuyentaban otras: en este primer año se han activado inversiones en la ciudad por valor de más de 300 millones de euros.

En doce meses hemos visto cómo es posible, con voluntad política, el compromiso desbloquear los PAI del Grau y Benimaclet, que van a suponer 355.000 metros cuadrados de nuevas zonas verdes y la construcción de 4.000 viviendas, de las que 850 serán de alquiler asequible.

"Gente de palabra"

Hemos cumplido dotando de más personal y descentralizado las oficinas del padrón municipal para acabar con las colas. Cumplimos con más efectivos de bomberos y con la creación de una nueva unidad de Policía Local destinada a prevenir el botellón y las reyertas.

Solo han pasado doce meses, pero podemos mirar a los ojos a todos los vecinos y vecinas de Valencia para decirles que somos gente de palabra y que vamos a cumplir, todos y cada uno de los compromisos y proyectos presentes y de futuro para mejorar la calidad de vida de esta ciudad y sus habitantes.

Porque Valencia y la Comunitat Valenciana se merecían este cambio que ya comienza a percibirse. Y lo hacemos, además, con la complicidad y sintonía del Gobierno de la Generalitat, liderado por el president Carlos Mazón.

Valencia cuenta con Mazón, un aliado para defender y reivindicar ante el Gobierno de Pedro Sánchez las inversiones e infraestructuras que esta ciudad necesita. Lo estamos viendo precisamente estos días con los aportes de agua a la Albufera que el Gobierno nos niega.

Pero estos doce meses de gobierno también han servido para descubrir la hipocresía de la oposición, que tras ocho años gobernando, ha descubierto ahora el problema los pisos turísticos, la falta de vivienda pública de alquiler asequible, las colas del padrón, o es estado ruinoso de algunos mercados municipales o instalaciones deportivas.

¿A quién quieren engañar? A los valencianos y valencianas ya no los engañan más porque el pasado 28 de mayo les dieron la espalda, castigando su incapacidad para gestionar y su falta de compromiso y ambición para Valencia.

Insisto: no se trata de ser complacientes ni morir de éxito. Queda mucho trabajo por hacer, y nos dejaremos la piel para ello, pero, como dice la alcaldesa, María José Catalá, Valencia está de moda y no vamos a cejar en el empeño de que la ciudad recupere el protagonismo que merece y se merecen los ciudadanos. Porque en este gobierno cumplimos.

Juan Carlos Caballero es el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Valencia