Si has soñado alguna vez con una piscina que en lugar de agua rebosase con cerveza, o que de alguna fuente de la ciudad se pudiera beber esta suculenta bebida de cebada, entonces estás de suerte, porque lo que hasta ahora parecía irracional, absurdo e inalcanzable se hace realidad.
Eslovenia, todavía una gran desconocida para los viajeros, alberga un encandilador pueblo de 5000 habitantes. Su nombre es Zalec y es adorada por los cerveceros más fieles. Situada a unos 60 kilómetros de Liubliana, su capital, y ubicada en Valle de la Baja Savinja, es bien conocida con el sobrenombre del “Valle del oro verde” por su alta producción de lúpulo. Ahora, y cumpliendo el sueño de muchos bebedores, Zalec ha incorporado una fuente pública de la que mana cerveza. La fuente se creará para seducir a los turistas y tiene un presupuesto de 350.000 euros (sin contar la cerveza). También es una manera de apoyar a los productores de lúpulo locales.
Aunque el proyecto ha sido aprobado en el pleno del Ayuntamiento, no todo el mundo ha dado señales de conformidad. Muchos de sus vecinos se han indignado con este proyecto asegurando que el dinero invertido en la fuente podría haberse destinado a otras actividades más culturales y sociales. De momento, del 50% de los costes se hará cargo el Ayuntamiento, mientras que el 50% restante provendrá de las aportaciones voluntarias y de las asociaciones comerciales.
Claro que el consumidor, a pesar de que la cerveza provenga de una fuente pública, deberá pagar seis euros por una jarra, que podrá llenar hasta tres veces y que después podrá llevar a casa. En total, tres dosis de 30 centilitros.