España se ha convertido con el paso de los años en uno de los países del mundo con más perros en los hogares. Según los últimos datos la Asociación Nacional de Fabricantes de Alimentos para Animales de Compañía (ANFAAC), en nuestro país hay 47.307.133 humanos y 9.280.821 perros. Mientras que el hecho de tener perros como mascotas no es algo tan popular en otros países, la realidad es que España se ha convertido en algo muy habitual. Y es por ello por lo que hay algunas regiones que ya cuentan con más perros que habitantes.
Si se analizan los datos por comunidades autónomas, Asturias, Aragón y Castilla y León son las regiones en las que más perros hay en las casas. Concretamente, en estas comunidades se registran tres perros por cada diez humanos, aproximadamente. Pero no es una tendencia que se siga en el resto de lugares de España. Y es que, otras como La Rioja, País Vasco y Navarra se sitúan en los últimos puestos de la clasificación de las regiones con más y menos perros.
El adiestramiento es básico a la hora de poder disfrutar de los perros en los hogares. Pero, en muchas ocasiones, la obediencia pasa también por la implicación de los dueños de los canes en su educación. Si hay algo muy habitual en los dueños de los perros es la tendencia a darles comidas que ingieren los humanos en su día a día. Y aunque muchos lo desconocen, la realidad es que esta práctica puede resultar perjudicial, llegando incluso a provocarles la muerte por la ingesta de determinados alimentos.
Imagen de archivo de un cachorro de labrador.
El medio británico Daily Mail ha publicado recientemente un reportaje sobre perros. En concreto, un periodista del medio ha recogido la opinión de varios especialistas en seguros para empresas de mascotas, que han desvelado cuáles son los alimentos habituales en los hogares que los dueños de los canes no deberían dar nunca a sus perros.
Es el caso, por ejemplo, de algunos productos como las pasas, las uvas o las nueces, que pueden provocar problemas serios de salud a los perros en caso de que estos lleguen a ingerirlos. Pero no son los únicos alimentos que los expertos han aconsejado no dar a los perros. A la lista se añaden también otros como las nueces de macadamia, las cebollas, el ajo, el xilitol o algunos productos lácteos.
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Durante la entrevista al Daily Mail, los expertos han trasladado una serie de consejos a los dueños de los perros. Y es que una de las cosas que deben tener en cuenta si quieren garantizar una buena vida a sus perros es conocer cuáles son los alimentos que no deberían ingerir bajo ningún concepto. Y no solo eso, sino que para evitar que los canes los ingieran, es necesario mantener estos productos alejados de los perros.
Imagen de archivo de un perro comiendo.
Los alimentos mencionados anteriormente son muy habituales en los hogares. De hecho, forman parte del día a día de los ciudadanos, ya que son productos que se pueden incorporar a los platos de maneras muy diversas. Sin embargo, tal y como han detallado los expertos, es fundamental evitar que los perros ingieran estos productos, ya que podría provocarles graves problemas de salud, e incluso la muerte.
Por ejemplo, las uvas y las pasas pueden provocar a los perros insuficiencias renales. Esto puede ocurrir, incluso, aunque las mascotas hayan ingerido una cantidad muy pequeña de estos alimentos. En el caso de las nueces de macadamia, por ejemplo, pueden provocar vómitos e hipotermia. Por ello es importante mantenerlas alejadas de las mascotas.
Otros de los alimentos que los expertos recomiendan no consumir son, por ejemplo, el ajo o la cebolla. A pesar de que son dos productos que los ciudadanos utilizan en su día a día para cocinar, lo cierto es que tienen efectos muy perjudiciales para los perros. Y es que pueden llegar a destruir sus glóbulos rojos y provocarles anemias.
Los expertos también inciden en la necesidad de evitar el consumo de xilitol y productos lácteos, en general. En el caso del primero, puede provocarles un aumento rápido de insulina y una posterior hipoglucemia. Y los lácteos, por su parte, pueden provocarles graves problemas digestivos ya que, aunque no lo parezca, muchos perros son intolerantes a la lactosa.