Durante la lactancia materna, las madres deben prestar especial atención a su dieta, ya que lo que consumen puede afectar la salud y el bienestar de su bebé.
Es cierto que se necesita una ingesta calórica adicional, pero no todos los alimentos son adecuados durante este período. Algunos pueden causar molestias en el bebé o incluso poner en riesgo su salud. Por ello, es importante conocer qué alimentos evitar o consumir con moderación durante la lactancia.
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Alcohol, un no rotundo
El número uno en la lista de cosas que las madres lactantes deben evitar es el alcohol. Aunque una copa ocasional puede no parecer dañina, el alcohol pasa a la leche materna y puede afectar al bebé.
Ingerir alcohol durante la lactancia puede afectar su sueño y desarrollo, y aumentar el riesgo de accidentes. Por lo tanto, se recomienda a las madres lactantes abstenerse por completo del consumo de alcohol o no amamantar horas después de beber.
La cafeína que no active mucho
Otro alimento que debe ser consumido con moderación es la cafeína. El café, el té y las bebidas energéticas contienen cafeína, que puede pasar a la leche materna en pequeñas cantidades. El exceso de cafeína puede hacer que el bebé esté irritable, nervioso o tenga dificultades para dormir. Además, las madres que consumen mucha cafeína pueden experimentar una disminución en su producción de leche.
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Evita los pescados con alto contenido en mercurio
El pescado es una excelente fuente de proteínas y ácidos grasos omega-3, que son beneficiosos para la salud. Sin embargo, ciertos tipos de pescado contienen altos niveles de mercurio, un metal pesado que puede ser perjudicial para el desarrollo neurológico del bebé.
Los pescados grandes como el tiburón o el atún rojo son algunos ejemplos de pescados con alto contenido de mercurio. En su lugar, se recomienda consumir los más pequeños y bajos en mercurio, como el salmón, la trucha o el arenque, que son muy nutritivos pero con menos riesgos para el bebé.
Alimentos picantes y condimentos fuertes, con moderación
Los alimentos muy picantes o condimentados pueden causar malestar estomacal en los bebés lactantes. Las especias como el chile, el curry y el ajo pueden transferirse a la leche materna y provocar cólicos o irritación en el estómago del menor.
Se recomienda consumirlos con moderación y observar la reacción. Si se observan síntomas de malestar después de consumir alimentos picantes, puede ser necesario reducir su ingesta o evitarlos por completo.
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Productos lácteos y gluten: observa las reacciones
Algunos bebés pueden ser sensibles a ciertos alimentos como los lácteos o el gluten. La leche de vaca y los productos lácteos pueden causar alergias o intolerancias en algunos bebés, provocando síntomas como diarrea o sarpullido en la piel.
Del mismo modo, el gluten presente en alimentos como el trigo, la cebada y el centeno puede causar problemas digestivos en bebés sensibles. Si se sospecha que el bebé tiene alguna sensibilidad alimentaria, se recomienda eliminar el alimento sospechoso de la dieta materna y observar.
La lactancia materna es un período crucial en la vida de un bebé, y la dieta de la madre juega un papel fundamental en su salud y desarrollo.
Es importante que las madres en esta situación se mantengan bien alimentadas y eviten los alimentos que puedan causar molestias al bebé. Siempre es recomendable consultar con un profesional de la salud o un dietista en caso de dudas o preocupaciones sobre la dieta durante la lactancia.