El sencillo truco del vaso para no gastar más en comprar pastillas de lavavajillas
- Este sencillo truco viral y muy económico, te ayudará a ahorrar y mantener limpia tu vajilla y cubiertos sin necesidad de gastar más dinero en comprar detergente o pastillas para el lavavajillas.
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A pesar de que el precio de la luz en España siga estabilizándose, encender algunos electrodomésticos del hogar y a determinadas horas, sigue siendo todo un esfuerzo económico para muchos hogares españoles. Este es el caso por ejemplo del lavavajillas, uno de esos electrodomésticos favoritos por gran parte de la población para hacer mucho más fácil la tediosa tarea de limpiar la cocina y evitar que la gran torre de vajilla y cubiertos no invada toda la cocina cada día. Pero si hay algo que destaca en cuanto al gasto de este electrodoméstico es, además del agua caliente y la electricidad, también el gasto mensual en abrillantador, sal para el cristal o pastillas de lavavajillas.
No se trata del tipo de material de limpieza más caro en el hogar, pero a la larga comprar estas pastillas de lavavajillas cada mes puede suponer un gasto en la lista de la compra bastante notable, sobre todo si tenemos en cuenta el aumento de los precios. Precisamente si lo que quieres es ahorrarte este dinero y no tener la necesidad de volver a comprar pastillas para el lavavajillas, esta vez te proponemos uno de los trucos caseros que se ha vuelto viral en las últimas semanas. Un sencillo truco con el que tu vajilla y cubiertos seguirán estando limpios y relucientes con tan solo dos productos muy económicos, que seguro tienes en casa.
El sencillo truco del vaso para no gastar más en pastillas de lavavajillas
Un truco que está haciendo que cada vez sean más las personas que opten por dejar de comprar este tipo de pastillas de lavavajillas y prefieran poner a prueba este truco casero con dos productos muy comunes en la mayoría de hogares españoles y que sobre todo destacan por su bajo coste: el vinagre blanco y el bicarbonato de sodio.
Para aplicar este truco en tu lavavajillas simplemente necesitarás empezar por espolvorear el bicarbonato de sodio por el lavavajillas y dejando un poco de ese bicarbonato apilado en el fondo, las rejillas y el cubertero del lavavajillas (aproximadamente media taza de bicarbonato en total).
Después de rociar el interior del electrodoméstico con el bicarbonato, es el momento de llenar un vaso de vinagre blanco hasta arriba y colocarlo en el centro de la rejilla superior del lavavajillas.
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Para ver los resultados, solo tendrás que iniciar el ciclo de lavado y esperar a que estos dos ingredientes hagan su magia ayudando a quitar la grasa y desinfectando todo lo que hayas metido en el lavavajillas. Al abrir el lavavajillas, este estará completamente libre de grasa y cal y con un olor agradable.
Además de para lavar tus platos y cubiertos, lo mejor es que utilices este truco del vaso para lavar y desinfectar tu lavavajillas una vez cada mes.
Todas las aplicaciones que el vinagre blanco puede tener en tu lavavajillas
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El vinagre blanco es una sustancia versátil que puede tener varias aplicaciones útiles en el lavavajillas y en el mantenimiento de tu cocina en general. Aquí te destacamos otras formas en las que puedes usar vinagre blanco para el lavavajillas:
- Eliminación de olores desagradables: Si tu lavavajillas desarrolla olores desagradables, puedes eliminarlos vertiendo una taza de vinagre blanco en el fondo del lavavajillas y ejecutando un ciclo de lavado en vacío. El vinagre ayuda a desodorizar el interior y a eliminar los malos olores.
- Desincrustante de platos y cubiertos: El vinagre blanco puede ser útil si tienes problemas con manchas en tus platos o cubiertos. Puedes sumergir los artículos manchados en una solución de agua y vinagre blanco antes de lavarlos en el lavavajillas. Esto puede ayudar a aflojar y eliminar las manchas más difíciles.
- Limpieza de los brazos rociadores: Los brazos rociadores del lavavajillas pueden obstruirse con partículas de comida y minerales con el tiempo, lo que puede afectar su eficacia. Puedes retirar los brazos rociadores y remojarlos en vinagre blanco para eliminar estas obstrucciones.
- Suavizador de agua: Si vives en una zona con agua dura, el vinagre blanco puede actuar como un suavizador de agua natural en tu lavavajillas. Agregar un poco de vinagre en el dispensador de enjuague ayudará a prevenir la acumulación de depósitos minerales en los platos y el interior del lavavajillas.