Este es el antídoto contra la soledad no deseada: la amistad entre personas jóvenes y ancianas

A medida que pasa el tiempo, hay algo que todos vivimos: el envejecimiento. Nos hacemos mayores cada segundo que pasa y cada año, percibimos las cosas totalmente diferentes, el trabajo, los objetivos, los sueños… pero hay algo, que si es bueno, siempre permanece, la amistad.

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Todos queremos llegar a mayores con las personas que nos rodean hoy en día, seguir riendo con ellos, seguir yendo al mismo bar a tomar café, seguir paseando por las mismas calles. La amistad dura tantos años como las personas quieran cuidarla, y quienes la cuidan, son mucho más felices.

Los expertos coinciden en que hay factores que influyen directamente en la felicidad, y uno de ellos son las interacciones sociales. Tener relaciones que intervengan diariamente en tu alegría y sean partícipes de la misma te hace mucho más feliz.

A medida que pasan los años nos volvemos más frágiles, tenemos menos ganas de salir y nuestras relaciones de amistad terminan por desvanecerse. En España existen millones de personas mayores que viven en situación de soledad, buscando esa compañía que en su día desapareció.

"Más sabe el diablo por viejo, que por diablo", y es que el refranero español nos ha traído muchas cosas, pero la primera de todas es la veracidad. Los jóvenes de hoy en día tienen mucho que aprender de las personas mayores, ellos han vivido todas las alegrías y angustias de la vida, y son ellos quienes tienen los mejores consejos para afrontarla.

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Las amistades intergeneracionales aportan a las personas multitud de beneficios y ya son muchas las que apuestan por ellas. A pesar de que no sea algo habitual, pueden ser un gran antídoto contra la soledad de los más mayores, pero también, la de los más jóvenes. 

Antonio e Inés

Esta normalización de amistad entre diferentes generaciones ya se hizo viral en las redes de la mano de Antonio Gil e Inés Gatóo. La madrileña es fotógrafa y a su vez, creadora de contenido, su encuentro con Antonio recorrió todas las plataformas e hizo a muchas personas, valorar a los más mayores.

La amistad comienza cuando Inés iba a grabar un vídeo, de repente, se cruza un señor mayor con andador, gafas y una sonrisa de oreja a oreja. "Buenas tardes, me vas a hacer una foto, ¿o qué?", fueron las primeras palabras que dijo Antonio. Una frase con la que se ganó no solo la amistad de Inés, sino la de todos los que estaban detrás de la pantalla.

El vídeo se hizo tan viral que en Tiktok ya acumula 16,4 millones de visualizaciones. Inés —@inesgatoo en redes— no solo le hizo la foto a Antonio, sino que días después la imprimió y se la regaló, "Ya les he dicho a él y a su mujer que iré a pasear con ellos de vez en cuando. Normalicemos amistades entre personas jóvenes y ancianas", comunicó la fotógrafa en sus redes.

El valor de la compañía

Más de 2.000.000 de mayores en España viven solos, comen solos, pasean solos y duermen solos. A pesar de que muchos de ellos disfruten de la soledad, la gran mayoría echa en falta la compañía y todo lo que puede ofrecer.

El ser humano es un ser social y está dispuesto por la naturaleza para vivir y relacionarse con otros seres humanos. La amistad puede mejorar considerablemente la vida de las personas, siendo un apoyo emocional en momentos de dificultad y el soporte en los momentos de felicidad.

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En las residencias geriátricas algunos residentes viven en soledad y anhelan un contacto con personas de cualquier edad. Ya hay muchas organizaciones las que pelean por darles compañía a las personas mayores y luchan por una mejor calidad de vida para ellos.

Adopta un abuelo

La organización ya acumula más de 6.200 abuelos 'adoptados', más de 12.500 voluntarios y más de 48.000 horas de compañía. Adopta un abuelo, tiene como misión conectar diferentes generaciones, formando amistades y creando experiencias transformadoras que supongan un punto de inflexión en la vida de las personas.

Desde Adopta un abuelo celebran la fiesta de cumpleaños de los abuelos, cumplen sus sueños, les llevan de viaje, cuentan historias y hacen talleres. Los más jóvenes pueden participar en voluntariados, actividades, recaudando fondos y donando.

Programa 'convive'

El Ayuntamiento de Madrid ha lanzado un programa solidario de convivencia intergeneracional entre personas mayores de 65 años y jóvenes estudiantes para compartir no solo la vivienda, sino conocimientos y valores. 

Los jóvenes estudiantes podrán compartir piso con las personas mayores que puedan valerse por sí mismas. Deberán establecer unas normas de convivencia y contraprestaciones de común acuerdo, como el acompañamiento al médico o compras de alimentos.