La transformación de las ciudades es uno de los principales desafíos a los que nos enfrentamos como humanidad, y como país. Precisamente por ello, la segunda edición de Wake Up, Spain! dedicó un espacio importante a las reflexiones sobre los retos presentes y futuros de las urbes de nuestro país.
Óscar Puente, alcalde de Valladolid, fue uno los encargados de exponer el momento que viven las ciudades tras unos años muy complejos derivados de la crisis generada por la pandemia de la Covid-19. Para encarar este nuevo tiempo, Puente destacó el rol que pueden jugar los fondos europeos desplegados en el Plan de Recuperación.
"Tenemos que aprovechar los fondos Next Generation para que las ciudades salgan adaptadas a las nuevas realidades", expuso el político socialista.
A fin de cuentas, son los consistorios los que, como aseguró Puente, dinamizan y construyen ciudades más igualitarias. Y los fondos europeos Next Generation serán vitales para que esa reconstrucción y reordenación urbanística se lleve a cabo.
Transformar el modelo de ciudad
"¿Cómo van a afectar los fondos europeos? El Ayuntamiento de Valladolid ha captado en lo que llevamos de año cerca de 22 millones de euros, la cifra de inversión anual en los años de las reglas fiscales. ¡En tres meses hemos captado la cifra de inversión de un año normal!". El alcalde vallisoletano alabó el "espíritu profundamente transformador" de los Next Generation: "Buscan transformar los modelos de las ciudades de Europa".
Para Valladolid, admitió el edil, "es una oportunidad de acelerar la transición del proyecto de ciudad que tenemos, que se podrá alcanzar mucho más rápido". Puente reconoció que "más o menos" todas las ciudades están en la misma línea en cuanto a los cambios necesarios: una mayor apuesta por el transporte público sostenible y las bicicletas, un reverdecimiento de las urbes, etc. También, explicó que ayudarán a "hacer una apuesta turística completamente diferente"
Para lo cual, puntualizó, "los fondos van a liberar nuestros recursos para poder acelerar los cambios. Estamos hablando de una transformación a una velocidad increíble". Eso sí, ha advertido de que "no todo es de color de rosa" y admitió que los fondos europeos "exigen muchísima gestión en un momento en el que las administraciones no tenemos las manos suficientes", concluyó.