El "piensa global, actúa local" que rige la Agenda 2030 tiene un objetivo claro: solucionar los grandes problemas mundiales de nuestra época buscando sus soluciones en nuestro propio entorno. De ahí la importancia del municipalismo, que es capaz de aterrizar los desafíos del presente y del futuro en el día a día de la ciudadanía, como recordaron varios alcaldes y alcaldesas, en la última edición de 'Wake up, Spain!'.
Ese fue el caso de la alcaldesa de Santander, Gema Igual Ortiz, que, durante el evento organizado por EL ESPAÑOL, Invertia y D+I, resaltó el papel fundamental que juegan las entidades locales en el desarrollo de cualquier país.
Especialmente, resaltó, si los consistorios se alejan del cortoplacismo tan común en la política actual y empiezan a "consolidar proyectos a largo plazo".
Para Igual Ortiz, serán las ciudades "en las que el gobierno municipal ha sido estable y donde ha habido planes estables a largo plazo" donde los fondos europeos "se consoliden".
De ahí, afirmó, la necesidad de "proyectos maduros y planificados". Porque, aseguró, sólo así seremos capaces de llevar a cabo una "transformación urbana real y eficaz".
Pensar en el mañana
Como ejemplo de planificación a largo plazo, la alcaldesa de Santader puso de relieve sus planes estratégicos. El de 2010-2020, recordó, hizo una fuerte apuesta por revitalizar la capital cántabra desde un punto de vista artístico y cultural.
Por su parte, el plan 2020-2030 se centrará en impulsar la agenda urbana y la movilidad sostenible, dos elementos clave para la transformación de las ciudades que busca Naciones Unidas con sus Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
"Hay que apostar porque Santander sea una ciudad para caminar", afirmó su regidora. Y para evitar que por sus calles circulen más de 90.000 coches diarios, el consistorio presentará "proyectos de escaleras y rampas mecánicas a fondos europeos, y también la ampliación de carriles bicis y sus aparcamientos, seguros y vigilados" a Europa.
Así, no sólo se reducirán las emisiones de gases de efecto invernadero y se reducirán los niveles de ruido provocado por el tráfico rodado: también se mejorará la salud de la ciudadanía.
Turismo sostenible
Sin duda, el replanteamiento de la movilidad urbana acarreará numerosos beneficios. Pero también jugará un papel fundamental en el nuevo modelo de turismo que Santander quiere desarrollar.
"Desarrollaremos un producto ambiental sostenible relacionado con el turismo para disfrutar de toda la ciudad" de manera respetuosa con el entorno, aseguró. Y para ello, dijo, "serán esenciales los aparcamientos disuasorios" y el compromiso de todos.