“La transformación de las infraestructuras nos va a permitir ser cada vez más competitivos y más eficiente a la hora de operar”. Son palabras de Alfonso Sánchez, director gerente de la EMT Madrid pronunciadas durante la segunda jornada del III Wake Up, Spain!, el evento organizado por EL ESPAÑOL, Invertia y D+I en colaboración con EY, Oesia, Microsoft y EMT de Madrid.
En su caso, ahora mismo están inmersos en un proceso que afecta no sólo a los autobuses “que estamos renovando permanentemente”, y que lleva “una complejidad tremenda”. También afecta a otras líneas de negocio, como es el caso de la transformación de sus cinco centro de operaciones.
“Vamos a convertirlos en centros cero emisiones, no sólo desde el punto de vista de la carga, también desde el abastecimiento energético de los centros. Por tanto, una transformación no sólo de las infraestructuras, también de la empresa”, subrayó Alfonso Sánchez.
Preguntado por si hay suficientes trabajadores para acometer esta revolución, y siguiendo la cadena de valor, José Miguel Atienza, director de la Escuela de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de la Universidad Politécnica de Madrid, remarcó que “hay trabajadores muy buenos, pero necesitamos más”.
Asimismo, destacó que España tiene las mejores empresas de ingeniería y construcción. Buena prueba de ello es su cada vez más creciente internacionalización. Y se llevan a los ingenieros españoles en sus proyectos en el exterior. “Estamos generando menos ingenieros de los que el sistema requiere. Esperemos que vaya mejorando en los próximos años”, indicó. Entre ellos, el talento femenino, ahora en el 30%.
Un talento que es necesario en empresas como Typsa. Su director general de Infraestructuras del Transporte, Rafael Morán, manifestó que “necesitamos captar ese talento para empezar la planificación y el diseño. Es fundamental pensar que en el origen está el éxito. Cuanto más claro tengamos desde el principio qué infraestructuras dejar, mejor. Porque se ahorrarán costes y se simplificará el proceso”.
Y el proceso llega a la fase final, a la construcción. “Desde la construcción se está haciendo un esfuerzo en optimizar el recorrido, disminuir de forma relevante el CO2”, señaló Justo Vicente, CEO de Construcción España de Acciona. “El big data facilita esa gestión. Estamos desarrollando nuevos materiales que pueden absorber o disminuir su propia emisión. Nuestros proveedores también están haciendo un esfuerzo en adaptarse”.
Por último, Iñigo de la Serna, director del Madrid Green Urban Mobility Lab (un grupo de más de 40 empresas privadas), dijo que su misión es la de desarrollar proyectos concretos que se puedan desarrollar en la ciudad de Madrid “para que continúe la senda de ser un referente en movilidad urbana. Proyectos colaborativos para conseguir mejorar la sostenibilidad, una sostenibilidad entendida no solo desde el punto de vista ambiental, también social y económica”.