Juzgan a dos hombres que le arrancaron los dientes a otro con un casco por quejarse del ruido en Xàbia

Una paliza, dos dientes menos y quedarse inconsciente en el suelo. Esto es lo que le valió a un vecino de Xàbia el bajar a la calle a quejarse del ruido que estaban haciendo dos personas en verano en plena madrugada, después de haberles advertido desde su balcón que no podía dormir.

Según recoge el relato de Fiscalía, los hechos ocurrieron el 14 de agosto de 2018, en la localidad de la Marina Alta. La víctima se asomó a su ventana para reprender a los dos encausados, que estaban en la calle, porque estaban haciendo mucho ruido a altas horas de la noche. 

Ante la falta de respuesta, el hombre finalmente decidió bajar a la calle. Allí se inició una discusión que derivó en una pelea, en la que los dos acusados presuntamente "propinaron al vecino patadas y puñetazos por todo el cuerpo y en la cabeza" mientras este trataba de defenderse sin éxito.

Durante el incidente uno de los agresores incluso le golpeó con un casco en la boca, lo que supuso arrancar dos dientes a la víctima. El vecino quedó en el suelo inconsciente por la paliza.

Por estos hechos la Fiscalía pide para cada uno de los dos procesados una pena de cuatro años y medio de prisión por un delito de lesiones. El juicio se celebrará el martes 22 de marzo en la Sección Décima de la Audiencia Provincial de Alicante. 

Fotos de menores

Ese mismo día, pero en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, tendrá lugar el juicio a un hombre acusado de solicitar de forma insistente fotografías de contenido sexual a una menor de edad, así como de conseguir que otra joven de 16 años le enviara una imagen de este tipo tras habérselo pedido.

Los hechos ocurrieron entre los meses de junio de 2018 y febrero de 2019, cuando el encausado contactó con la primera víctima, de 14 años, a través de la aplicación de Whatsapp y le solicitó las fotos íntimas, algo a lo que la niña se negó.

Mientras sucedía esto, contactó con otra víctima, de 16 años, para solicitarle lo mismo. En este caso sí consiguió su objetivo, según especifica el relato de los hechos. 

La Fiscalía pide para este hombre una pena de prisión de siete años por un delito de abuso sexual a menores en su modalidad de sexting (envió de material de contenido sexual a través de teléfonos móviles), además de un delito de explotación y corrupción de menores.