Alicante

Agentes de la Policía Nacional, a través de una macroperación policial, han detenido a cinco miembros de una red criminal dedicada a dar cobijo a los migrantes recién llegados a las costas alicantinas, mientras que esperaban la posibilidad de continuar su destino hacia otras ciudades europeas. Utilizaban para ello los denominados pisos patera, donde les hacinaban en situaciones "que carecían de condiciones mínimas de salubridad", haciéndoles vivir incluso en cocinas.

Esta operación supuso en realidad la continuación de una primera fase donde se investigaban las redes criminales dedicadas a facilitar la inmigración ilegal desde origen. Los agentes ya habían detenido a una veintena de personas, responsables de patronear pateras y organizar viajes procedentes de países del continente africano, como integrantes del eslabón final de este tipo de organizaciones dedicada a "favorecer la inmigración ilegal que ha azotado las costas alicantinas durante este verano".

Sin embargo, esta trama "no concluía con el atraque de las pateras en la costa". En muchas ocasiones el acuerdo que los migrantes contraían con la organización "incluía el ser alojados durante un breve periodo de días en un piso hasta poder continuar su viaje hasta su destino en otras ciudades europeas", normalmente a Francia o países del Benelux.

Por este motivo, los agentes de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Comisaría Provincial de Alicante, incardinados en la UCRIF-3, junto con el Grupo Operativo de Respuesta (GOR) de la Comisaría de Alicante Norte, dedicaron sus esfuerzos a la averiguación del lugar donde se encontraban estas viviendas.

Interior de uno de los 'pisos patera'.

En la Zona Norte

Tras el operativo policial desplegado los investigadores consiguieron descubrir hasta seis viviendas en la zona norte de Alicante, donde podrían haber alojado a los migrantes, y se establecieron "dispositivos de vigilancia discreta en torno a ellos".

Finalmente, y una vez que se había certificado "la actividad ilícita", se procedió a desmantelar estas seis viviendas donde la Policía Nacional descubrió "las paupérrimas condiciones en las que les alojaban". En una de estas viviendas, por ejemplo, habían convertido la cocina en una habitación, y como cocina habían derivado peligrosamente el gas hasta la galería.

Durante el operativo, se procedió a la detención de cinco personas como presuntos integrantes de la red de favorecimiento de la inmigración ilegal, así como otras tres personas por infracción a la ley de extranjería. También se identificaron a un total de 17 moradores, aparte de los anteriores, entre los que había dos menores de edad no acompañados de 14 y 15 años, que fueron ingresados en un centro de menores de Alicante.

Los detenidos, todos de nacionalidad argelina, de edades comprendidas entre los 21 y 71 años de edad, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de la misma localidad.

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