El Consorcio Provincial de Bomberos de Alicante ha dado por controlado el incendio forestal de Benasau a las 18.30 horas de esta tarde, tras haber sido estabilizado ayer y tras quemar 270 hectáreas en un perímetro de 25 kilómetros y movilizar a 330 efectivos desde su inicio este martes.

El incendio, que ha afectado a los municipios de Benasau, Penáguila y Alcoleja, obligó también a desalojar a vecinos que ya pudieron regresar a sus casas.

El incendio comenzó el pasado 30 de julio y afectó a una zona con una orografía muy complicada, aunque la noche de ese día ya se consiguió reducir la llama. Se utilizaron drones que localizaron zonas calientes que pudieron ser atacadas rápidamente.

Emergencias ha subrayado la coordinación de las agencias integradas y participantes en la emergencia ya que desde el inicio del fuego han trabajado 330 efectivos, divididos en 70 medios terrestres y 12 aéreos.

De estos 330, 200 pertenecen al Consorcio de Bomberos de Alicante y el Servicio de Bomberos Forestales de la Generalitat Valenciana y 130 a la Unidad Militar de Emergencias (UME), a la que la Generalitat pidió ayuda.

Otro incendio en Castellón

Los efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos de Castellón han retirado varios árboles caídos y ha rescatado a dos personas que habían quedado atrapadas por el agua en su coche en Vila-real a causa de la tormenta que ha afectado a la provincia y ha provocado varios incendios, entre ellos uno forestal en Benicàssim, que continúa activo.

Trabajan en el fuego dos dotaciones del Consorcio Provincial de Castellón, siete unidades de los Bomberos de la Generalitat, cinco medios aéreos, una dotación de Bomberos de Castelló y un coordinador forestal.

Según han explicado a EFE fuentes del Consorcio Provincial, la tormenta, que ha dejado episodio de granizo en numerosas poblaciones de la provincia y un fuerte aguacero con aparato eléctrico, ha provocado incendios por la caída de rayos en Benicàssim, Vallibona, Atzeneta del Maestrat, Sant Joan de Moró y Les Alqueries.

En todos los fuegos se ha actuado con rapidez y debido a la lluvia no se ha complicado la situación, aunque se trabaja todavía en el de Benicàssim, el más reciente, ya que en la zona ha llovido mucho menos y no estaba tan húmeda la vegetación.

También han retirado árboles caídos a la vía pública en la localidad de Bejís, en el Alto Palancia, y una dotación ha rescatado a dos personas cuyo vehículo había quedado atrapado por el agua en una calle del municipio de Vila-real.