Agricultores alicantinos protestando en Madrid.

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Agricultores alicantinos se plantan en Madrid para protestar contra el Gobierno: "Nos mandan a la ruina"

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Los agricultores y ganaderos alicantinos están al límite. Un centenar de miembros de ASAJA Alicante han viajado hasta Madrid para protestar en las mismas puertas del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación por su "permisividad" frente a acuerdos que ponen "en jaque al sector".

Una de las principales reivindicaciones de ASAJA Alicante es el acuerdo Unión Europea-Mercosur, firmado hace escasos días, que hace peligrar la viabilidad de los cultivos de cítricos, claves en la Comunitat Valenciana.

Aseguran que este acuerdo permitirá la entrada masiva de naranjas y limones de países de Sudamérica. "No olvidemos que, en condiciones normales, Brasil y Argentina abarcan grandes producciones a bajos costes: no cumplen exigentes normativas sanitarias y tampoco necesitan riego. Y, por otro lado, tendrá repercusión en el zumo exprimido congelado o concentrado, pues entrará sin aranceles y podrá venderse al consumidor a precios muy inferiores a los del zumo nacional", indican en un comunicado.

Para ASAJA, esta entrada masiva de productos hortofrutícolas y carne será un problema por no cumplir con los mismos estándares de calidad. "Allí, en los países que integran el Mercosur, no se imponen a las restricciones fitosanitarias que aquí tenemos ni de sanidad vegetal, lo que evidentemente perjudicará las cotizaciones en origen de nuestros agricultores ante la entrada masiva de productos más baratos, pero también menos seguros", apuntan.

Todo ello hace que el presidente de ASAJA Alicante, José Vicente Andreu, califique el acuerdo como "desleal" y resalte que con ello la Unión Europea "manda a la ruina a la agricultura y ganadería española y también europea. Hacen oídos sordos y van a conseguir que nuestros cítricos se queden en nuestros árboles".

Otra de sus quejas tiene que ver con el problema del agua en el Levante, en Alicante. "No es de justicia que el sector agrario tenga que estar soportando constantes amenazas sobre la permanencia del trasvase Tajo-Segura", lamentan, y piden que el tema del agua sea una cuestión de Estado.

Andreu destaca que esta medida es "imperiosa" para la supervivencia de la actividad agraria, más aún si cabe en el castigado sureste español.

Las demandas han sido compartidas por las principales organizaciones nacionales, que se han respaldado en la postura frente al agua y han pedido al Estado que hagan lo propio "para unir en vez de dividir territorios".

La Ley de la Cadena Alimentaria, así como la creación de un observatorio de precios que sirva como referencia para que agricultores e intermediarios puedan firmar contratos justos y no permitan la venta a pérdidas, ha sido otro de los temas reivindicados.