Los hosteleros de Alicante estallan: "A nosotros no nos dejan abrir las barras, pero para las Fallas vale todo"
Están de acuerdo con que se celebren estos eventos con las medidas de seguridad "pero es un contrasentido que nosotros tengamos aforos al 50%".
30 agosto, 2021 14:23Noticias relacionadas
La celebración de las Fallas en Valencia durante la primera semana de septiembre ha levantado ampollas entre determinados sectores empresariales alicantinos, quienes consideran que el Gobierno valenciano ha dispensado un trato preferente a estas fiestas mientras mantiene restricciones importantes de movilidad y aforo.
El presidente de la Asociación de Restaurantes de Alicante (ARA), César Anca, considera que las celebraciones multitudinarias con las adecuadas medidas de seguridad "son bienvenidas", pero asegura que "es un contrasentido que en Valencia se permitan estas fiestas mientras los restaurantes tenemos prohibidas cosas como tener gente en la barra".
El Gobierno valenciano mantiene varias restricciones vigentes hasta el próximo 6 de septiembre. Dos de ellas afectan a derechos fundamentales: el toque de queda en 66 municipios de la región, entre ellos Valencia y Alicante, y las reuniones limitadas a diez personas. También se ha prohibido el ocio nocturno y se ha acotado el horario de los restaurantes: hasta las 00:30 horas, con la mitad de aforo en el interior.
Para Anca, es este último punto el que "no tiene absolutamente ningún sentido". "Llevamos con unas restricciones brutales todo este tiempo, y de repente aquí no ha oasado nada y se permiten actos que conllevan concentraciones de público. Y nosotros no podemos tener a alguien comiendo en la barra y con aforos de la mitad del local", agrega.
"Si la excusa de las restricciones es que sirven para controlar el flujo de personas es muy difícil de explicar que esas reglas no valen para los pasacalles y los desfiles, por ejemplo", añadió el presidente de ARA.
El chef reiteró que a él no le parece mal "que se celebre lo que sea siempre que esté controlado, y de hecho ha habido conciertos con bastante gente. Lo que no entendemos es que de buenas a primeras parece que todo vale". "Y esto no es una guerra entre Alicante y Valencia, es simplemente sentido común", concluyó.
Los hosteleros alicantinos no han sido los únicos que se han quejado de la celebración de las Fallas. La patronal hotelera Hosbec, con casi una treintenta de establecimientos en la provincia de Valencia, arremetió a finales de la semana pasada contra este evento al considerar que no iba a suponer un incremento de ocupación y sin embargo sí podía poner en riesgo la recuperación sanitaria.
Para los hoteles, la celebración de las Fallas "es un error" que "puede retrasar la eliminación de las restricciones, tan necesaria para la recuperación de la economía". El Gobierno valenciano, por su parte, ha modificado el reglamento para permitir determinados actos durante estas fiestas, como por ejemplo los desfiles.
Un impacto "nulo"
Por su parte, la Coordinadora de hostelería de los barrios de Valencia ha hecho un balance del fin de semana anterior a la celebración de las Fallas y ha concluido que la Plantá no ha tenido "ningún impacto turístico" para la primera semana de septiembre.
Tampoco está generando actividad hostelera en la ciudad "y mucho menos en las ciudades del área metropolitana que van a celebrar las fallas suspendidas en 2020", ha lamentado este lunes la Coordinadora.
"Teniendo en cuenta que la cuenta atrás de la celebración de las Fallas coincide con las últimas fechas del periodo vacacional en agosto, los valencianos están apurando sus viajes vacacionales y los últimos días de este mes en sus segundas residencias o en la casa del pueblo", explican fuentes de la entidad.
"Las restricciones y los horarios del toque de queda vacían las calles a la hora de las cenas e impiden las rutas falleras previas a la Plantà, por lo que el fin de semana previo a las Fallas ha sido un desastre, y se han confirmado plenamente las malas expectativas de las pymes del ocio y la hostelería, cuya actividad no llega al 20 % de lo que sería un fin de semana pre-Fallas normal", añaden.