Tres años después de la última romería, miles de peregrinos han vuelto a salir este jueves a la calles de Alicante para celebrar Santa Faz en una ruta de unos 8 kilómetros entre la catedral de San Nicolás y el monasterio de Santa Faz. Los paraguas acompañan a la Peregrina en un 28 de abril que parece estar condicionado a la lluvia, pero que no ha impedido celebrar este día tan especial que no se repetía desde 2019.
Esta tradición se repite desde hace 533 años (1489) y tan solo se había interrumpido durante tanto tiempo en la Guerra Civil, cuando no se celebró desde 1937 hasta 1941, en un evento en el que se venera uno de los pliegues que usó la Verónica para secar el rostro de Jesucristo en su camino al monte Calvario, reliquia que se custodia en el viejo caserón custodiado por las monjas Clarisas.
La romería ha arrancado a las 8.18 horas a las puertas de la concatedral de San Nicolás de Bari para recorrer los ocho kilómetros que distan hasta el monasterio, donde el nuevo obispo de Orihuela-Alicante, José Ignacio Munilla, realizará una misa tras sacar del camarín la imagen de la Santa Faz.
Durante el recorrido, que se realiza ya bajo la lluvia, participarán el president de la Generalitat, el socialista Ximo Puig; el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, la síndica de Ciudadanos en Les Corts, Ruth Merino, o la consellera de Agricultura, Mireia Mollà (Compromís), entre otros.
En declaraciones a periodistas, Puig ha pedido el fin de la guerra en Ucrania y la recuperación económica y social "para ir suturando las fracturas".
Respecto a la posibilidad de que la romería sea considerada como Fiesta de Interés Autonómico, ha resaltado que apoya el proyecto y que la Santa Faz "no necesita ningún tipo de distinción porque es ella misma una distinción para todos nosotros".
"Es un hecho relevante para la Comunitat porque parte de la identidad de Alicante y la voluntad de concordia", ha concluido.
Por su parte, el alcalde de la ciudad, Luis Barcala, ha asegurado que esta romería se realizará "con mucha emoción e ilusión" y que tras dos años en blanco por la pandemia, "el tiempo da lo mismo porque lo importante es salir acompañados de la reliquia de la Santa Faz".
La peregrinación tiene su origen en el 17 de marzo de 1489 y conmemora el milagro de la lágrima que ocurrió ese día durante una procesión de rogativas con el lienzo como protagonista y con motivo de una fuerte sequía que azotaba a Alicante.
Más de 15.000 cañas de romero se han repartido desde primera hora de la mañana en los aledaños de San Nicolás para facilitar el trayecto de los alicantinos, muchos de ellos vestidos con el típico blusón negro de labrador y el pañuelo azul y blanco.