El fuego de la 'Nit de la Cremà' despide las tradicionales fallas de Benidorm

El fuego despide las fiestas falleras de Benidorm hasta el año que viene. Los grandes monumentos ardieron como manda la tradición en la 'Nit de la Cremà' en la noche del martes 19 de marzo para despedir una semana que ha estado llena de música, color y el aroma de la pólvora.

Las fiestas josefinas invadieron las calles de la ciudad y se desarrollaron sin incidentes durante toda su celebración. En Benidorm hay tres comisiones falleras, Els Tolls, Rincón de Loix y Benidorm Centro, que están coordinadas desde la Junta Local Fallera.

Las entidades pusieron la nota festiva a la penúltima semana de marzo acompañando a Las Fallas de Valencia. Todas las 'cremàs’ fueron seguidas por centenares de turistas y residentes que no quisieron perderse la ocasión.

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El alcalde de Benidorm, Toni Pérez, y la concejal de Fiestas, Mariló Cebreros, junto a miembros del equipo de gobierno, acompañaron a la presidenta de la Junta Local Fallera, Esther García, y a las falleras mayor e infantil de las tres comisiones de la ciudad en una 'Nit de la Cremà’' que despidió una fiesta que es seña de identidad de los pueblos valencianos hasta el 2025.

El fuego llegó primero en las fallas infantiles, que comenzaron a arder a las 22:30 horas en el Rincón y a las 23.00 en Benidorm Centro y Els Tolls. Poco después llegó el turno de las estructuras mayores. A las 23:30 se quemaron los grandes monumentos y el primero en arder fue el de la Falla del Rincón de Loix, a medianoche le llegó el turno a la Falla Benidorm Centro y, a las 00:30 horas a Els Tolls.

El dispositivo de seguridad de Policía Local, Protección Civil, Cruz Roja y bomberos estuvo pendiente en todo momento del normal desarrollo de los actos y cuando el fuego los consumió llegó el turno de los servicios de limpieza que "en tiempo récord dejaron la ciudad a punto para un nuevo día laboral", señalan desde el consistorio.

Esculturas monumentales

Por otro lado, seis esculturas monumentales toman el Paseo de Poniente de Benidorm desde comienzos de marzo. Encanto, Arrullo, Refugio, Conciencia, Sueño y Crepúsculo son los nombres de las figuras de mármol y bronce que convierten el emblemático espacio en un museo al aire libre.

Las obras del escultor costarricense Jorge Enrique Jiménez Deredia se engloban en la exposición 'El viaje de la vida'. Y llega a Alicante después de pasar por Florencia, Roma, Ciudad de México, Shangai o Miami. El artista es además el primer escultor latinoamericano que tiene obra en la Basílica de San Pedro en el Vaticano, en el interior de un nicho proyectado por Miguel Ángel Buonarroti entre 1544 y 1564.

Toni Pérez ha trasladado que para Benidorm "es un orgullo poder volver a disfrutar de esta colección en un espacio como este Paseo de Poniente". Asimismo, el primer edil ha recordado que estamos ante "otra exposición maravillosa, cultura en la calle y de altísimo nivel", en lo que ha calificado "de una gran sala de exposiciones desde Benidorm para el mundo".