De una mascletà virtual a un concierto de vídeo arte. Eso es lo que son capaces de ofrecer un grupo de personas con alzhéimer que están experimentando con una herramienta de creación digital. Los beneficios que aporta al tratamiento de esta enfermedad lo están estudiando desde Alcoy y Valencia con la fundación Fisabio y la UPV.
"Se ha abierto un nuevo mundo", asegura con entusiasmo Begoña Faura. La directora de AFA Canals, la asociación de familiares y personas con alzhéimer y otras demencias, valora la sencillez y eficacia de la herramienta que usan para estas actividades porque les ha ilusionado y ha hecho que pierdan el miedo a manejarse con tabletas.
De conseguir que eso sea así se ha encargado desde el principio Jorge Sastre. Él es el profesor de la UPV que creó el programa Soundcool "para que niños de primaria lo puedan usar". Y de hecho, así estuvo trabajando durante años. Si entonces lo hacía pensando en el tamaño de pantalla de un móvil, ahora con el de una tableta "el diseño es sencillo y aún más grande".
A través de estas pantallas los diferentes usuarios de AFA Canals y Valencia se conectan para crear juntos música y vídeo. Así se podrá ver este jueves en la retransmisión que harán en el auditorio de la facultad de Bellas Artes de la UPV. Su objetivo es "avanzar en la demostración que el aspecto colaborativo potencia la estimulación cognitiva".
Más motivados
El neurólogo del Hospital Virgen de los Lirios de Alcoy e investigador de la Fundación Fisabio José Manuel Moltó se encarga de estudiar qué impacto tiene Soundcool en estas personas. "Se comprobó que el incremento de la motivación, la creatividad, la interrelación y la implicación observada en personas con diversidad funcional y en educación también se dan con los pacientes de enfermedades neurodegenerativas".
Faura así lo corrobora. En su caso ya empezaron a colaborar con Sastre el año pasado para crear una mascletà virtual mediante este sistema. "Fue increíble porque nos abre muchas formas de intervenir", asegura. "Lo que antes era una ficha o una manualidad aquí lo integramos todo. La gente que participó no era de los más enfermos, pero se graduó para que todos pudieran participar".
Sastre destaca que una de sus ideas es "progresar en la adaptación de la tecnología Soundcool para el caso de enfermedades neurodegenerativas". En este caso, prosigue Faura, lo hicieron al estimularlos para que la herramienta fuera modulable por todos, sea cual sea el nivel de desarrollo de la enfermedad de Alzhéimer que tengan.
Antes del concierto de este jueves ya estuvieron familiarizándose con el sistema en un ensayo la semana anterior. Tras realizarlo les pasan cuestionarios para comprobar "si entienden lo que se va a hacer, si en la siguiente sesión lo recuerdan, si es fácil de manejar la aplicación por si hay que hacer cambios, y si es comprensible".
"La experiencia de la mascletà fue el romper el tabú de que no saben manejar esas nuevas tecnologías", destaca Faura. Para simular la experiencia de lo que supone el popular disparo de pólvora, Sastre les creó un guion y a partir de ahí la asociación creó "como si fuera un ejercicio para ellos una intervención adaptada que la hicieron con su propio guion y dibujos".