Solo seis meses después de su marcha, Justin Pitts, uno de los últimos héroes de la afición lucentina ya está de vuelta para poner la guinda al nuevo proyecto deportivo del HLA Alicante. El club ha trabajado en la sombra en los últimos días para hacer realidad el sueño de la afición y entregarle a su entrenador Gonzalo García de Vitoria, un jugador diferencial capaz de iluminar la pista y encender la grada.
Pitts, uno de los grandes ídolos de la afición local, había puesto punto y final a su etapa en Alicante tras acabar la temporada para firmar por el Saint Quentin de la ProB francesa, pero problemas personales le hicieron romper recientemente su compromiso. Su salida abrió todo tipo de especulaciones y ahí el Lucentum vio una oportunidad de recuperar al que fue durante los tres últimos años su jugador franquicia.
Pitts es un jugador especial y necesita un ecosistema muy concreto para ofrecer su mejor versión. Y sabe que no hay mejor lugar que el Pedro Ferrándiz, bajo el abrigo de los aficionados alicantinos, para sacar a relucir su extenso y deslumbrante catálogo baloncestístico.
Con la llegada del base estadounidense, que ha disputado 88 partidos oficiales con el equipo alicantino, el HLA Alicante completa las 12 fichas de la plantilla. El jugador viajará desde Estados Unidos en los próximos días a Alicante y se incorporará con el resto de la plantilla una vez haya superado el reconocimiento médico.
El nuevo entrenador del equipo, Gonzalo García de Vitoria, calificó al base, en declaraciones a los medios del club alicantino, como un jugador "diferente y con mucha capacidad para generar sus propios puntos".
"Es un jugador que conecta con la grada y es muy importante. Es un fichaje muy ilusionante que nos hace crecer y mejorar exponencialmente", añadió.
Hasta la fecha, el jugador estadounidense había trabajado siempre en Alicante a las órdenes del técnico Pedro Rivero, ahora en Palencia, por lo que esta será su primera experiencia con Gonzalo García de Vitoria, quien no ha dudado en elogiar a su nuevo jugador.
Además de ganar potencia de fuego con Pitts, el HLA Alicante, que sube un peldaño en sus aspiraciones tras la llegada del estadounidense, aumenta su plantilla en una competición larga en la que será determinante la profundidad de los banquillos para conseguir los objetivos marcados.