Perelló y el presidente, Dani Adriasola.

Perelló y el presidente, Dani Adriasola.

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Perelló: "Me motiva aportar mi granito de arena para nos volvamos a ilusionar con el baloncesto en Alicante"

Pablo Verdú
Alicante
Publicada

La gran esperanza del HLA Alicante para evitar un cataclismo histórico ya ha tomado posesión del Centro de Tecnificación. Rubén Perelló regresa a un lugar en el que fue feliz e hizo disfrutar a miles de alicantinos con el objetivo de arreglar un puzle roto que deambula como alma en pena por la categoría tras enlazar ocho derrotas en otras tantas jornadas.

Posiblemente, al balear le haya pesado más el corazón que la cabeza para aceptar la oferta del club. “Soy una persona valiente, echada para adelante”, afirma el técnico, que no teme poner en peligro la imagen ganadora que se labró en la ciudad hace 11 años cuando llevó al Lucentum a la ACB. “El pasado es pasado”, señala.

“Mucha gente me ha mandado mensajes diciéndome si estaba loco, pero también es verdad que me dicen que soy valiente, que olé y que las cosas van a ir bien”, ha confesado el entrenador, que ha dejado el cuerpo técnico del Fuenlabrada, líder, para encadenarse al futuro del colista de la competición.

Escoltado por el director deportivo, Asier Alonso, y el presidente, Dani Adriosola, Perelló intenta enviar un mensaje optimista que ayude a disipar el negativismo que rodea al club desde hace meses. “Solo puede prometer trabajo y energía positiva para revertir la situación y lo conseguiremos con la ayuda de todos”, asegura el palmesano, que regresa con las maletas repletas de ilusión, pero consciente de la dificultad del reto que le espera por delante.

“Va a ser un camino largo y difícil. Me gusta el club y la plantilla. Ahora lo prioritario es cambiar las cabezas. Lo pasado, pasado está y hay que buscar una nueva dinámica de juego y diversión”, explica Perelló, que no ha querido detallar cuántos cambios serán necesarios realizar en la plantilla para lograr el objetivo. De momento, el club ya ha confirmado la llegada del lituano Mindaugas Kacinas y es posible que, como mínimo, lleguen dos fichajes más.

“Hay jugadores de mucho nivel que no están en un buen estado de forma. Las dinámicas hacen que a veces se vea el vaso medio vacío”, desvela Perelló, cuyo principal reto es que el equipo “vuelva a disfrutar” y demuestre “que puede competir contra todos” siendo “más equipo que nunca”.

“Me parece una oportunidad y me motiva aportar mi granito de arena para que todos nos volvamos a ilusionar con el baloncesto en Alicante”, añade el balear, que reclama a los aficionados “que apoyen al equipo y no le dejen de lado”.

“El club está poniendo toda la carne en el asador y llegarán jugadores para equilibrar y ajustar algunas posiciones. No será fácil y llevará unos meses encontrar esa dinámica”, insiste el entrenador, que considera que su plantilla precisa ahora más trabajo de diván que táctico.

Hay grandísimos jugadores, a los que queremos recuperar para que tengan la misma ilusión de cuando ficharon por este equipo. Necesitamos dar con la tecla para hacer ese reset y que el equipo disfrute”, insiste el preparador, que pide a la afición lucentina que se implique al máximo en el próximo partido, ante el Zamora, para crear un gran ambiente de baloncesto.

Es verdad que estamos en un 0-8, pero a partir de ahora mi mensaje siempre será positivo, el vaso lleno. Vengo con energía y positividad y eso es lo que quiero transmitir al equipo y a la ciudad de Alicante”, añade.

El director deportivo del club, Asier Alonso, ha elogiado, por su parte, la “valentía” de Perelló y se mostró convencido de que aportará “energía y liderazgo” para cambiar de forma radical de un equipo en estado crítico.