La Diputación de Alicante ha aprobado la propuesta del PP para pedir al Gobierno central el cese inmediato del ministro de Consumo, Alberto Garzón, como consecuencia de sus "reiterados ataques" al sector ganadero español, en una iniciativa que ha contado con la negativa del PSOE y Compromís, que han lamentado la "falta de acierto" de Garzón, pero han pedido "más seriedad".
En el pleno ordinario del mes de enero, Ciudadanos se ha incorporado en una enmienda parcial a la propuesta popular, en la que se ha "reafirmado" el apoyo de la institución a la industria cárnicas. El diputado de Economía y portavoz popular, Eduardo Dolón, ha señalado durante la sesión que "ni la provincia de Alicante ni el conjunto de España se pueden permitir un ministro que, de forma irresponsable, osada e ignorante, pone en riesgo un sector que genera más de dos millones de puestos de trabajo".
Así, han criticado al ministro de Consumo, Alberto Garzón, que afirmó en una entrevista en el medio británico The Guardian que las granjas de gran tamaño "contaminan el suelo, el agua y luego exportan esta carne de mala calidad de estos animales maltratados".
"No podemos tener un ministro en el Gobierno que vaya a un periódico a decir esas cosas", ha criticado Dolón, quien ha resaltado el peso económico del sector ganadero en la provincia, que aporta más de 50.000 toneladas de carne a través de sus más de 200.000 cabezas de ganado porcino, ovino, caprino y bovino.
La moción defendida por el Grupo Popular también solicita al ministro de Agricultura que "desmienta inmediatamente las afirmaciones de su compañero de gabinete" y reclama una campaña nacional e internacional de defensa y apoyo al sector ganadero cárnico.
Por su parte, el portavoz de Ciudadanos, Javier Gutiérrez, ha calificado de "delirante" la situación generada por Garzón, y ha presentado una enmienda a la moción inicial, en la que se ha requerido al Gobierno de España a que apruebe, en el plazo de tres meses, un plan integral de ayudas específico para el sector ganadero para mejorar instalaciones y garantizar el bienestar animal.
También se ha solicitado en la enmienda que se defienda la contratación laboral familiar y de temporeros en el ámbito agrícola y la flexibilización de las modalidades de contratación de energía en el sector: "Estamos ante un penoso episodio que demuestra que tenemos un ministro que no se entera y que es un peligro para la industria agroalimentaria de este país", ha señalado Gutiérrez.
Votos negativos
Tanto PSPV-PSOE como Compromís han votado en contra de la moción a pesar de reconocer "la falta de acierto" del titular de Consumo en sus declaraciones, al tiempo que han criticado la posición del Partido Popular: "Es posible que el ministro debiera haberse expresado de una forma más adecuada pero no tanto como para montar este debate absurdo", ha indicado el portavoz de Compromís, Gerard Fullana.
El portavoz socialista, Toni Francés, ha reclamado "más seriedad" y ha respaldado el rechazo del ministro Garzón a las macrogranjas por su efecto en el medio ambiente: "Asumimos lo que ha dicho el ministro de que todas las actividades económicas deben de ser sostenibles y respetuosas con el medio ambiente y que las macrogranjas son un problema para el propio sector".