Un año y seis meses de prisión en el que tendrá que someterse a tratamiento ambulatorio. Esa es la condena que ha dictado la Audiencia de Alicante a un joven de 26 años residente en Mutxamel por tratar de abusar sexualmente de su sobrino de 11 años.
El suceso se produjo el 6 de mayo de 2018. Aquel domingo se quedaban a pasar la noche en casa de los padres del acusado, con quien compartía domicilio, sus dos sobrinos. Según considera probado el tribunal de la Sección Décima, el joven intentó que el niño le practicase una felación.
En la sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, se especifica que el acusado se había despojado de su ropa para, a continuación, colocar la mano en la cabeza del menor con la intención de forzarlo a "satisfacer sus deseos sexuales".
No obstante, el niño se negó a seguir las indicaciones de su tío, "sin llegar a efectuar al procesado tocamiento alguno". Eso sí, su oposición provocó que su hermana de ocho años se despertase y que alertase a su abuela. Y ese aviso fue el que permitió que la madre de los menores interpusiese la denuncia al día siguiente.
El testimonio del menor
En la sentencia, los magistrados valoran que la declaración del menor, a partir de la grabación reproducida en el juicio, ofrece toda credibilidad respecto a los hechos relatados en la denuncia.
El fallo detalla que su testimonio fue "concreto y absolutamente persistente en todas las manifestaciones" que había prestado a lo largo del proceso. Un factor que contrastaba frente a la declaración ofrecida por el acusado, quien se limitó a apuntar durante la vista "que no recordaba nada de lo sucedido".
El tribunal considera al acusado culpable de un delito de abuso sexual en grado de tentativa. Por ello acuerda la imposición de una condena de un año y medio de prisión, acompañada de un tratamiento ambulatorio en un centro adecuado. Esta, se impone como "medida de seguridad" a la que tendrá que someterse durante el tiempo de la condena, una decisión que se computará como cumplimiento de la pena.
La sentencia también cree demostrado que el acusado "padece una alteración del espectro autista en grado leve". Esta, prosiguen, "afecta a su inteligencia y su voluntad", como recogen los informes forenses aportados a la causa y como había expuesto la Fiscalía. De ahí que plantearan una rebaja de la condena solicitada en su escrito de calificación inicial.
La sentencia es recurrible en apelación ante la Sala de lo Civil y lo Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).