La primera quincena de junio será lluviosa en Alicante, pero ¿cuál es la previsión para el verano?
Jorge Olcina (UA) recuerda que el verano comienza el 21 de junio y la inestabilidad meteorológica es un fenómeno común en primavera.
1 junio, 2023 06:20Coger o no el paraguas está siendo el dilema más frecuente durante estos días, en los que se repiten los avisos amarillos por lluvias en gran parte de la provincia de Alicante. Después de tanta agua, más de uno se pregunta si esto es normal a primeros de junio, y sobre todo, algo que a todos interesa: ¿cuándo llegará finalmente el verano?
El catedrático de Análisis Geográfico Regional en la Universidad de Alicante (UA), Jorge Olcina, explica que la inestabilidad meteorológica está dentro de lo normal en esta época del año, ya que la primavera se caracteriza precisamente por días soleados que van seguidos de otros más lluviosos. Olcina recuerda que el verano empieza oficialmente el 21 de junio.
En cuanto a la previsión para la primera quincena de junio parece que será muy parecida a la última quincena del mes de mayo. "Hay que prepararse para las nuevas tormentas que se formarán en los próximos días". Aunque el meteorólogo de la UA especifica que no serán DANAS, sino más bien lluvias puntuales y localizadas con una distribución anárquica. "Nos esperan 10 o 15 días de tiempo revuelto, incierto e inestable".
Verano 2023, ¿abrasador?
El año de 2022, España vivió el verano (junio, julio y agosto) más caluroso de su serie de datos con registros desde 1961 por una anomalí amedia de +2.2 grados centígrados (ºC). Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) agosto estuvo marcado por una temperatura media en la España peninsular de 24,7 °C.
Jorge Olcina señala que los modelos de la Aemet y el americano apuntaban a un verano cálido. "No lo será tanto como el año pasado, pero sí contará con algunas olas de calor importantes". El catedrático de la UA insiste en que todavía seguimos en primavera y las lluvias de estos días han venido como "agua de mayo", sobre todo para el campo. En otras palabras, abrasador, pero no como en 2022.
Por otra parte, también explica que no hay previsión de DANAS ni lluvias torrenciales con grandes consecuencias para la población. La semana pasada, las lluvias dejaron registros de hasta más de 150 litros por metro cuadrado en poblaciones de Alicante y Valencia. "No es una situación de DANAS lo que estamos viviendo, pero se mantiene el residuo de esa masa fría en las capas altas y se generan tormentas".
Las precipitaciones de estos días han beneficiado al campo, que se ahorrará un par de riegos este verano. Además, otros de los grandes beneficiarios de las lluvias están siendo los embalses y pantanos. En la cuenca del Segura las reservas están al 35 por ciento, 1,5 puntos más que la semana pasada y 12,5 puntos menos que la media, aunque siguen por debajo de las cifras de 2022.
"Las lluvias locales no contribuyen a parar el déficit de recursos que tenemos contra la sequía. Lo que sí que están haciendo es retrasar el fantasma de la necesidad de aplicar restricciones importantes". En otras palabras, han ayudado a mejorar la situación pero no son la "solución" contra la sequía, concluye Jorge Olcina.