El empeño de la Comunidad Valenciana y de otras autonomías partidarias del pasaporte Covid para vetar la entrada a determinadas instalaciones a las personas no vacunadas contra el coronavirus se ha topado con la oposición de Fernando Simón.
El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias defendió este jueves en la conferencia inaugural del III Congreso de Médicos de Toledo que esta medida "no tiene sentido" con el 90% de la población vacunada, como es el caso de España.
"¿Qué sentido tiene?", se preguntó Simón, ante la alta tasa de inmunización que existe en el país, que contrasta con otros como Alemania, el más castigado de la Unión Europea por el virus en este momento, cuya 67,8% de la población está vacunada.
Para estos contextos como el alemán, Fernando Simón sí que ve que el pasaporte Covid "es útil" o cuando desde España se vaya a viajar al extranjero. A su juicio, que se restringa mediante esta herramienta la entrada en los locales de hostelería "tendría un impacto menos importante".
No es la primera vez que Simón sale al paso de alguna declaración o medida anunciada por Ximo Puig. En enero de este año, por ejemplo, tachaba de "error", en contra de lo mencionado por el president, que no se diera una segunda dosis a los políticos y otros colectivos que se habían vacunado antes de tiempo. Además, al principio del verano, el líder valenciano lamentaba que no llegaran turistas británicos a las costas valencianas por las restricciones, a lo que el médico respondió que "no es mejor que no vengan", para evitar riesgos.
Puig, el pasaporte y las dudas
La valenciana es una de las comunidades donde parece inminente su entrada en vigor, según ha avanzado el president de la Generalitat, Ximo Puig, esta semana en Alicante. De hecho, ha vaticinado que a finales de la misma, podría estar lista esta medida, siempre y cuando cuente con el aval del Tribunal Superior de Justicia, organismo al que ya se le ha elevado la consulta.
Puig considera que es la iniciativa necesaria ante el casi medio millón de valencianos que todavía no se han vacunado y ante el repunte de contagios que se está registrando en la actualidad. Pretende así presionarles para que se decanten por la inmunización.
Sin embargo, ya han salido voces autonómicas contrarias al pasaporte Covid, como el doctor en Medicina Preventiva y Salud Pública Salvador Peiró, quien ha señalado que no ve con buenos ojos esta herramienta que, entiende, "generará falsas confianzas" de que "no va a pasar nada" porque al estar vacunados todos los que están en el establecimiento, no va a haber peligro de contagio. Por ello, ha recordado que, los que han recibido las dosis sí "pueden contagiar a otros vacunados y a los no vacunados, y viceversa".
También ha generado inquietud en las grandes superficies valencianas, que esperan que finalmente no se aplique. Otros de los escenarios que se está estudiando su introducción es en la hostelería, hoteles, ocio nocturno y residencias de ancianos.
Otras autonomías
Una de las autonomías que han apostado fuerte por el pasaporte Covid es Cataluña, que, en la actualidad, está sopesando ampliarlo más allá de las discotecas. Como en el caso del País Vasco, se ha solicitado al Tribunal Superior de Justicia de la región su aval jurídico para implantarlo.
La Xunta de Galicia, por su parte, ha señalado esta semana que está estudiando prohibir la entrada a los hospitales a todas aquellas visitas a familiares que no cuenten con la vacuna, mientras que Cantabria ha ido más allá y ha pedido que "se vacune a todo el mundo, por las buenas o por las malas, por lo civil o por lo militar", o se obligue a los no vacunados a "quedarse en casa, cerrados a cal y canto", ha dicho su presidente Miguel Ángel Revilla.