El Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana (CESM) considera que no se dan las circunstancias para la docencia, en la menos dos especialidades, ante "la situación que padece tanto el Hospital como los Centros de Salud del Departamento de Torrevieja, de carencia de personal para el desarrollo adecuado de la atención a la ciudadanía y la docencia en formación postgrado".

Desde la reversión del hospital a la sanidad pública el pasado 15 de octubre de 2021, la fuga de especialistas y dimisiones ha sido la tónica general en varios servicios del centro, que tiene carácter "universitario". Por eso, va a solicitar a la gerente, Pilar Santos, que no pida las plazas ofertadas.

Y lo hace en las especialidades de "radiodiagnóstico" y "medicina familiar", que son las dos que peor están funcionando con la gestión pública, junto con las urgencias y medicina interna.

En este sentido, el CESM, comunica a la gerente "que previamente a ejercer acciones en defensa de los futuros MIR que opten de dichas plazas y que vean mermada o imposibilitada su formación, provocando una pérdida de oportunidad cuando menos, sino un engaño al optar a las mismas".

Así, le requieren a que proceda "a revocar dicha oferta formativa, hasta tanto y cuanto se den cumplimiento a las exigencias que establecen las Comisiones Nacionales de ambas especialidades".

Las especialidades

En el caso de radiodiagnóstico, el sindicato señala que la ley "establece que como mínimo el servicio deberá contar con 9 especialistas en plantilla, además del jefe de Servicio".

"Nos consta que, dicho Servicio de Radiodiagnóstico de su hospital, desde hace varios meses, dispone únicamente de uno y tal y como hemos podido comprobar desde hace pocos días, dos médicos especialistas en su plantilla. Hecho que obliga derivar gran cantidad de exploraciones programadas y de urgencias a otros centros e impide una correcta supervisión de los médicos residentes", expresa el sindicato.

"Al ni siquiera disponer de un adjunto por cada residente y difícilmente poder abarcar todas las áreas de dicha especialidad, condición necesaria para una formación completa en la especialidad", prosigue el sindicato, "no se cumple con los requisitos para "la protección de los futuros especialistas que opten a las plazas ofertadas".

En cuanto a medicina familiar, el sindicato expone que "la práctica totalidad de los cupos de Médico de Familia de los centros de salud acreditados de un número de pacientes asignado, excede en más del 30% el número máximo de pacientes por cupo, para a una atención de adecuada (1.500).

Ante esta situación que "está provocando de forma habitual y repetida agendas con más de 40 pacientes al día", hay que proteger a los futuros MIR ya que se "contraviene uno de los requisitos exigidos para poder ofrecer docencia".

Además, indican, "nos consta que más de la mitad de los médicos que ocupan plaza

de Médico de Familia de Equipo de Atención Primaria, no solo no disponen de acreditación docente, sino que ni siquiera tienen título homologado de Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria, lo que les incapacita para desempeñar el mencionado puesto y, más aún, para supervisar la docencia en dicha especialidad".